Los hechos, que todavía investiga la Guardia Civil, ocurrieron durante la madrugada del pasado martes. Fuentes de la investigación expusieron que se intuye que se trata de una banda que actúa en toda la comarca del Bajo Guadalquivir, pues no es en el primer municipio que roban cobre en grandes cantidades, delito que no podría ser llevado a cabo por una o dos personas sólo. En el polideportivo dejaron peladas las ocho torretas que iluminan las pistas con sus grandes focos.
De cada una, de 25 metros de altura, penden dos cables, lo que significa que sólo en el robo del cableado de estas torretas se llevaron unos 400 metros. Hay que sumar los cables de las farolas pequeñas que están distribuidas por el recinto, incluido el sector de las piscinas, donde también se llevaron 12 metros de una tubería de cobre. Los ladrones respetaron tan sólo la pista de pádel y la de tenis, pero por la sencilla razón de que son las más visibles desde la carretera y podían haber sido sorprendidos.
Es el cuarto robo en unas instalaciones deportivas de la provincia que trasciende en el último mes. Previamente sufrieron similares asaltos las de Gelves, El Coronil y El Viso del Alcor. Y es que este tipo de recintos son de los favoritos para estas bandas.
