Los niños del Polígono Sur, junto a su monitor Arturo Barbosa, intentan realizar una formación con los kayaks.Los niños del Polígono Sur también tienen derecho a descubrir el Guadalquivir. Un total de 30 menores, de entre 10 y 13 años, pudieron disfrutar ayer de una mañana en el río a bordo de un kayak. Gracias a la colaboración altruista del club de piragüismo y kayak La Tropa y la empresa de turismo activo Kayak Sevilla con la asociación Entre Amigos, responsable de las escuelas de verano del colegio Manuel Altolaguirre y el CEIP Andalucía, los niños disfrutaron del Guadalquivir en primera persona.

Pese a que los nervios fueron los primeros aliados, una vez se montaron, las ganas de cruzar el río les llevó a más de uno a perderse por la orilla. Isabel Silva, de 10 años, se mostraba entusiasmada al ver cómo disfrutaron "todos juntos" paleando hasta el Puente de Triana. Para su hermano Jacobo, dos años mayor que ella, "lo más divertido fue hacer carreras con las embarcaciones". Una euforia que más de una vez provocó que el kayak se desestabilizara.

La gran mayoría era la primera vez que se aventuraba a navegar por el río, no obstante muchos, como el niño de 13 años Samuel Capitán, aseguraron que desde ayer su tercer deporte favorito, después del fútbol y el baloncesto, era montar en kayak.

Aunque el primer sentimiento sea el miedo, el monitor de Entre Amigos Arturo Barbosa asegura que en el agua todos "pierden el pánico". Al salir del agua el sentimiento de superación y la alegría por vivir un día diferente a su realidad les hace sentir como reyes, coinciden los responsables de la actividad.

La intención de sacar a estos niños de un entorno social aislado motivó al socio del club La Tropa Javier Ros a plantear esta actividad "solidaria, educativa y deportiva" dentro del entorno medioambiental de la ciudad hispalense. Conocer algo más allá del barrio es una experiencia que los niños agradecen con cariño, ya que la realidad que allí viven "no es la misma que experimentan en este tipo de actividades", indica el voluntario de la escuela de verano Fernando Domingo.

Pero los más pequeños no son los únicos que disfrutan de este tipo de actividades: para el responsable de Kayak Sevilla, Santiago Salvador, ver cómo estos niños son felices con un deporte que le apasiona es "muy satisfactorio".

Lejos de las olas de la playa que otros muchos niños sevillanos disfrutan en verano, los pequeños del Polígono Sur encuentran en la salida en kayak el antídoto a su situación.