A raíz de la prohibición de las corridas de toros aprobada por el Parlamento catalán esta semana, el PP andaluz ha decidido presentar una moción en todos los ayuntamientos de la comunidad "en defensa y protección de la fiesta". El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, calificó la decisión aprobada por mayoría en la Cámara catalana como uno de los acontecimientos "más lamentables" que están viviendo. Su partido está convencido de que es el Estado "quien tiene que ser el máximo garante de promover y tutelar el acceso a la cultura en todas sus manifestaciones", aunque en este asunto las competencias están transferidas a las comunidades.
"La fiesta de los toros es una de las manifestaciones más importantes y con mayor tradición y atractivo turístico del país" dijo Sanz y resaltó que la moción es una iniciativa "que busca garantizar la protección por parte de los poderes públicos de la fiesta como parte esencial de nuestro patrimonio cultural y turístico". Sanz considera que cualquier cambio en ese régimen especial "sólo puede ser a través de una ley en las Cortes Generales y no mediante una iniciativa de una comunidad", y confesó que el PP cree que es necesario "imponer cuantos medios de protección, conservación y divulgación estén en capacidad del Gobierno".
La comparecencia de ayer del número dos del PP-A sirvió para hacer un balance político del primer semestre del año. Sanz acusó al presidente José Antonio Griñán de haber "incumplido el 80% de sus compromisos electorales y de investidura" y lamentó la "falta de liderazgo y debilidad" del jefe del Ejecutivo, "que están pagando los andaluces". "Tenemos la sensación de que no hay Gobierno, liderazgo, proyecto ni iniciativa, dijo, "Griñán no manda ni dentro ni fuera de su partido".
