El informe de gestión que el PP-A presentará hoy en su congreso regional huirá de la autocrítica. El partido se define como la "única alternativa" al PSOE y considera que la escalada de las elecciones del 9-M -con diez diputados más- será la antesala del cambio en 2012.
Hoy comienza el XII congreso del PP-A en Córdoba. Arrancará con la memoria de gestión que el secretario general de los populares andaluces, Antonio Sanz, leerá en la tribuna, donde no aparece la palabra derrota. Ni siquiera se menciona que el PSOE ganó las pasadas elecciones autonómicas ni se analizan las causas de por qué el PP perdió los comicios. El partido presume de haber obtenido los mejores resultados de su historia al subir diez diputados en el Parlamento y situarse a sólo ocho escaños de los socialistas.
La formación califica su proyecto de "centrista, reformista" y apuesta por un "andalucismo constitucional". También destaca los "magníficos" resultados de las municipales de 2007, que le convirtió en la fuerza más votada en las capitales. El balance recuerda que el PP "ha tomado la calle" con infinidad de protestas contra el Gobierno y que el líder, Javier Arenas, se ha hecho miles de kilómetros para recorrer Andalucía.
El documento contrapone el "compromiso" de Rajoy con esta tierra frente a las "ausencias" de Zapatero. Y arremete contra el Ejecutivo de Chaves, que practica la política del "rodillo" y ha ocultado la crisis económica.
conquistar el centro. El congreso de los populares andaluces marcará la estrategia del partido para los próximos cuatro años con un objetivo claro: conquistar el centro político para hacer posible la alternancia en Andalucía en 2012. La persona sobre la que pesa ese reto volverá a ser Javier Arenas, que con toda seguridad será reelegido mañana. El equipo que le acompañará no sufrirá previsiblemente grandes cambios y mantendrá a los pesos pesados, ya que la renovación profunda se acometió en 2004.
Arenas llega a esta cita sin contestación interna, con los poderes territoriales de Andalucía amarrados y reforzado a nivel interno tras el congreso nacional de Valencia, pese a haber perdido tres elecciones. Su apoyo nítido al debilitado Mariano Rajoy le sirvió para alzarse a la cúpula del PP, en el puesto de vicesecretario Territorial, que compatibiliza con la presidencia regional. Además, consiguió que los andaluces tuvieran un papel central en la nueva ejecutiva.
En el cónclave que ahora comienza no se blindará como candidato a la Junta en 2012. No le hace falta amarrar esa confianza de los compromisarios, algo que sí hizo Mariano Rajoy en Valencia, ante un escenario de pugnas internas. El máximo responsable del PP-A ya se ha mostrado dispuesto a presentarse de nuevo a los comicios autonómicos dentro de cuatro años. Entonces sería su cuarta oportunidad de llegar a la Junta y son muchos en el PP los que piensan que sería la última.
La ejecutiva que diseñará para alcanzar el Gobierno aún no se ha dado a conocer, pero en ella estará su círculo de confianza e incorporará, según ha anunciado, a políticos jóvenes y a otros con proyección municipal. Y es que el congreso incidirá en la necesidad de ganar las próximas elecciones locales como el paso previo para vencer, un año después, en las autonómicas. El apoyo a los munícipes se traduce en movimientos como el de dar una vicepresidencia a José Antonio Nieto, presidente del PP de Córdoba y portavoz en este ayuntamiento. También ha sido confirmado como secretario general Antonio Sanz, que repetirá en el cargo.
En esta nueva etapa, el PP-A repite la estrategia de rodearse de expertos independientes, pero la dirección no moverá a su núcleo duro. Ahora se ha creado otro foro de que evoca a la plataforma Andaluces por el cambio y rescata a algunos de sus miembros, como Isidoro Beneroso o Javier Landa. La inclusión del ex concejal andalucista en Sevilla Rafael Carmona y de Enrique Bellido, expulsado del PP en 2002, es un síntoma del interés de Arenas por ensanchar la base social del partido.
Prueba de ello es que el congreso tendrá invitados históricos. Por primera vez tomarán la palabra los dirigentes de UGT, Manuel Pastrana, CCOO, Francisco Carbonero, y el presidente de los empresarios, Santiago Herrero. Arenas también estará arropado por numerosos líderes nacionales, incluido Rajoy, que clausurará el encuentro el domingo.
