Local

El PP pide el voto contra "el cerrojo socialista" de Sevilla

Arenas confía en que los resultados en la provincia sean el preludio de un vuelco electoral en 2012

el 08 may 2011 / 19:42 h.

TAGS:

El PP no se anda con remilgos y admite que piensa en la provincia de Sevilla más allá del 22-M, a sabiendas de que dar un zarpazo ahora en un feudo históricamente impregnado de socialis- mo permitiría soñar un vuelco electoral en La Moncloa e incluso en San Telmo. "Sevilla no debe ser cerrojo de nada, sino la puerta abierta a la confianza en el futuro", sentenció ayer el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, que se reunió con los 105 candidatos a las Alcaldías de la provincia.


Su idea del cerrojazo no es baladí. Desde los comicios locales de 1987, el PSOE ha mantenido una distancia superior a los cien mil votos con el PP. Esa diferencia es clave en el devenir de batallas reñidas como serán las generales y autonómicas de 2012. Pese a ese margen, los populares han ido escalando hasta tocar su techo precisamente en los últimos comicios de 2007, con 234.580 votos. Eso le valió para obtener 257 ediles y seis alcaldías -que al final fueron siete gracias al pacto con los independientes en Bormujos-. Pero esa escalada quedó eclipsada por el récord de participación socialista que, con 400.000 votos, reafirmó aún más su dominio haciéndose con 74 de las 105 Alcaldías de la provincia de Sevilla.


Con el fuerte desgaste político que supone la crisis y el paro, el PP confía en un cambio político, aunque eso suponga en números tan sólo un acercamiento al PSOE que seguirá, salvo hecatombe, como primera fuerza. Ya lo dijo ayer mismo el presidente del PP en Sevilla y alcalde de Tomares, José Luis Sanz: "Estos 105 candidatos representan el mapa del cambio, esa mancha azul que se extiende por toda la provincia".


Arenas sabe que, para sus aspiraciones, es necesario ese salto y, de hecho, no lo disfraza en su discurso político, donde afirma -y ayer insistió- que la provincia y la ciudad de Sevilla son "claves para el cambio de Andalucía y España". Para contribuir a ello, el PP no sólo ha optado por atizar con la tasa de desempleo, sino que lo complementa con "la renovación y rejuvenecimiento" de sus listas.

Arenas recordó que el 70% de sus candidatos se estrenan como cabeza de cartel e incluso algunos debutan como políticos. Además, el 40% son mujeres y un tercio tienen menos de 40 años, lo que denota la juventud de las listas. "Los equipos antiguos están en otros sitios y son sustituidos por gente joven, como prueban los 238 miembros de nuevas generaciones", recalcó ayer Arenas. Tanto es así que para atacar el feudo socialista de Sevilla se ampara no sólo en sus votantes tradicionales, sino "en toda la sociedad", consciente de que la clave es arrastrar a su terreno al socialista descontento con la gestión de la crisis económica llevada por su partido. Arenas señaló que maneja datos por los cuales "el 70% de los ciudadanos, coincidan o no con el PP, quieren un cambio". Y, aunque su discurso estuvo salpicado de referencias al desempleo y los posibles casos de corrupción de los gobiernos socialistas, aseguró que haría "una campaña moderada, cargada de propuestas de futuro", frente al mensaje "radical" del PSOE. "No vamos a entrar el trapo", se reafirmó. Aunque el discurso del líder del PP andaluz no fue personalista, sí que brindó varios guiños a sus candidatos, empezando por los siete que defienden Alcaldía personalizado en la figura del alcalde de Tomares, al que le calificó como "el mejor alcalde de la provincia". No obstante, es el modelo al que se agarran varios candidatos del PP en el Aljarafe como ejemplo de buena gestión. También arropó al alcaldable por Sevilla, Juan Ignacio Zoido, al que elevó por encima de figuras ilustres del partido como Rita Barberá o Alberto Ruiz-Gallardón. Por último, no se olvidó del candidato en Mairena del Aljarafe, Ricardo Tarno, con el que el PP se ha volcado en busca de una victoria como la de hace cuatro años en Tomares, y el de Marinaleda, el senador Rafael Salas.

  • 1