El Parlamento rechazó ayer con los votos de la izquierda la enmienda a la totalidad presentada por el PP-A al Presupuesto andaluz de 2013, el más restrictivo de la historia para poder cumplir con el objetivo del déficit. La Junta defendió las cuentas del próximo año, que ascienden a 30.706,7 millones de euros, un 4,1% menos que en 2012, porque "garantizan el mantenimiento de los servicios públicos sin privatizar ninguno" y atienden a los "más desfavorecidos". IU, socio del PSOE en San Telmo, dio su apoyo a un Presupuesto "sensible y humano" y se jactó de que tiene el "sello" social de la federación de izquierdas. El PP se quedó solo en su oposición frontal a unas cuentas "inmovilistas y que huelen a más paro".
El Presupuesto andaluz superó ayer su primer trámite parlamentario y se aprobará definitivamente a finales de diciembre. Los partidos sometieron el proyecto de ley a un debate largo pero descafeinado. A un lado, los socios del Gobierno andaluz cerraron filas con las cuentas de la Junta y culparon al Ejecutivo de Mariano Rajoy de los recortes . Enfrente el PP, único partido de la oposición, que por una parte desdeñó el Presupuesto y, por otra, ofreció la mano tendida al Gobierno de José Antonio Griñán. La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, se subió a la tribuna para defender un presupuesto "de contraste, no de confrontación" porque a su juicio demuestra que se puede gobernar de manera muy distinta al PP. Las cuentas tienen tres objetivos esenciales: luchar contra el paro, mantener la sanidad y la educación pública y auxiliar a los que peor lo están pasando por la crisis. En una comunidad que soporta una tasa de paro del 35%, la Junta destinará el próximo año 1.150 millones a políticas de empleo, 60 de ellos en un plan urgente de acción social para que los ayuntamientos contraten a parados de larga duración y víctimas de la violencia machista. Aguayo reconoció que todas las partidas bajan para cumplir con el severo objetivo del déficit (0,7% del PIB en 2013). La más sacrificada es la inversión, que se desploma otro 20%. Prácticamente solo suben las becas de estudio (un 7%). La prioridad, insistió la consejera, es que "ningún andaluz se quede atrás" ni pierda servicios públicos. Pero al líder del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido -que se estrenaba en un debate de presupuestos- no le convenció nada el argumentario de la Junta. Zoido recuperó en su intervención el eje paro, despilfarro y corrupción que le sirve al PP para censurar 30 años de gobiernos socialistas en la comunidad. Dijo que las cuentas de la Junta son un "desastre", que "desgraciadamente huelen más a paro" y que son unos presupuestos "inmovilistas porque no incluyen ninguna reforma". "En seis meses de Gobierno de izquierdas, ni una reforma. Ustedes tienen resistencia al cambio; son conservadores", les espetó. El dirigente de los populares disparó continuamente contra el "pacto de perdedores" y contra IU por asumir "ahora lo que criticaba hace un año".
Zoido hizo un repaso minucioso por todas las partidas que bajan en el Presupuesto, incluidas sanidad y educación, y lamentó que el "bipartito" no haya querido recortar en la "mastodóntica" administración paralela. El alcalde de Sevilla no olvidó su discurso municipalista y criticó el "maltrato" de la Junta a los ayuntamientos, a la vez que le reclamó que pague todas sus deudas con los proveedores porque, de lo contrario, se "hundirán".
Aunque la consejera agradeció a Zoido el tono de su intervención -él había hecho lo mismo minutos antes-, Martínez Aguayo le preguntó con sorna qué reformas reclama en Andalucía, "¿se refiere a las que hace el PP allá donde gobierna, a la reforma educativa, a la privatización de hospitales o al euro por receta?". Después de que Zoido ofreciera los votos de los diputados populares para "sacar a Andalucía de la crisis", la consejera expresó sus "dudas" de que el PP-A quiera pactar algo con el Gobierno andaluz y volvió a pedirle que vayan de la mano para exigir al Ejecutivo de Rajoy que el Presupuesto del Estado cumpla con el Estatuto e invierta en Andalucía según el peso de su población en España. "Parece que quiere firmar un pacto de silencio sobre los incumplimientos del Gobierno de Rajoy con Andalucía", le reprochó.En su turno de palabra, el portavoz económico de IU, Ignacio García, aseguró que los Presupuestos de la Junta para 2013 "no están mal" teniendo el cuenta "el cierre del grifo" que Andalucía ha tenido que soportar por parte del Gobierno central, de Europa y de los bancos. Recordó que el Presupuesto está "seriamente condicionado" por el plan de ajustes -que en la pasada primavera metió un tajo de 2.700 millones a las cuentas de 2012- exigido por Rajoy. García destacó el "sello de IU" en las cuentas públicas, en medidas como la fiscalidad progresiva, la lucha contra el fraude fiscal, la ley de transparencia o el banco de tierras. Por su parte, el portavoz socialista, Francisco Álvarez de la Chica, manifestó que al PP-A le "escuece" el Presupuesto andaluz porque supone claramente un "contraste" a los recortes que ha impuesto el Gobierno de Rajoy. A final de año los partidos reeditarán este debate.
