El anterior pleno tuvo lugar el 28 de diciembre, por lo que el regidor tuvo que oír críticas unánimes provenientes de los portavoces de PP, PA e IU, quienes se mostraron sorprendidos ante lo que consideraron un hecho "inaudito y sin precedentes" porque se salta, sostuvieron, el reglamento, que fija la celebración mínima de un pleno bimensual. De hecho, de las 15 mociones presentadas muchas habían perdido vigencia.
Luego se aprobó la aplicación del Real Decreto 8/2010 del 20 mayo, por el que el Gobierno central obliga a la reducción de los salarios públicos para combatir la crisis. La reducción será del 5% para los trabajadores. Alcalde y cargos políticos, por otro lado, se reducirán las asignaciones en un 10%, mientras que para los grupos políticos la rebaja será del 6%. No obstante, estas últimas se anunciaron sólo a efectos informativos.
También se debatió la liquidación del presupuesto de 2009. IU, PA y PP coincidieron en que las cifras estaban maquilladas porque no se computan las facturas de proveedores pendientes de pago, mientras que el edil de Hacienda, Manuel Jesús Morillo, sostuvo que el ejercicio se cierra con casi 183.000 euros de superávit y que las finanzas del Consistorio gozan de mejor salud que los del entorno.
