El PSOE andaluz, la federación más poderosa del partido, tiene la llave para abrir la renovación orgánica de los socialistas, que no terminan de cristalizar como alternativa de Gobierno pese al descontento ciudadano con los recortes sociales de Mariano Rajoy. Los socialistas andaluces tienen la llave, pero ayer no se acercaron ni un milímetro a la cerradura. De hecho, el presidente del partido, líder del PSOE-A y de la Junta, José Antonio Griñán, rechazó de antemano la convocatoria de un congreso extraordinario y el adelanto de las primarias para elegir al candidato socialista a la Presidencia. Griñán recibió muchos guiños de los críticos, sobre todo del líder del PSOE madrileño, Tomás Gómez, que pidió directamente a Alfredo Pérez Rubalcaba que "ceda el testigo a personas nuevas con ideas nuevas". Pero el andaluz se alineó con el secretario general del partido y zanjó el debate con un argumento rotundo: "es el PSOE al completo el que ha perdido el apoyo de la ciudadanía, no sólo su dirección", informa Europa Press. Griñán insistió en que ahora toca renovar contenidos programáticos, no personas.
En el Consejo Territorial de los socialistas, que se celebró ayer en la sede del partido en Ferraz, se visualizaron dos posturas: los barones que creen que la renovación del partido pasa por una renovación de la ejecutiva federal, y los que defienden que la renovación del PSOE pasa por renovar la propuesta del modelo autonómico, apostando por eso que Griñán llama "federalismo cooperativo". Así, el líder andaluz fue elegido ayer para presidir un grupo de trabajo sobre el modelo territorial en el que se abordará la reforma de la Constitución.
Los objetivos de este grupo serán tres: incluir a la sanidad pública en el capítulo de derechos fundamentales (ahora sólo está la educación), avanzar en la calidad democrática y cerrar el modelo autonómico con una estructura igualitaria, que garantice una mejor financiación de las comunidades. El PSOE quiere presentar las conclusiones antes de verano para debatirlas con el resto de partidos. Los socialistas se embarcarán entonces en un proceso de "debate abierto a la sociedad" que culminará en octubre de 2013, con una conferencia política en la que decidirán sus cambios organizativos, su propuesta de reforma constitucional y su modelo económico. Confían en salir de ese proceso con un perfil más sólido como alternativa de Gobierno.
Primarias // La estrategia del PSOE-A ha cambiado desde el último Consejo Territorial, que se celebró tras la derrota de las elecciones gallegas y vascas. Andalucía ejerció entonces un papel más duro hacia la ejecutiva. Madrid creyó que Griñán, con la fuerza de su federación, abriría camino a los críticos. Los barones de Castilla-La Mancha y Extremadura pensaron lo mismo y le acusaron de "falta de lealtad" hacia el partido.
Dos meses después, los andaluces han virado hacia la moderación. Siguen siendo muy críticos con la tibieza con que Rubalcaba está ejerciendo la labor de oposición a Rajoy en el Congreso. Pero en este choque de identidades orgánicas del partido, han decidido situarse públicamente con la dirección federal. Esta vez ha sido el vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, el que ha reclamado a los críticos, como Tomás Gómez, "lealtad hacia arriba y hacia abajo", instándole ayer a que sume esfuerzos para hacer "una oposición responsable".
Hace nueve meses, en el congreso del PSOE en Sevilla que eligió a Rubalcaba secretario general frente a Carme Chacón, Griñán orientó a los suyos hacia la candidata catalana. Creía necesario un nuevo rostro, más joven, y una dirección más intergeneracional. Ahora, sin embargo, la premura de la exministra por abrir las primarias no ha encontrado apoyos explícitos en las filas andaluzas. El presidente de la Junta, el socialista con más poder institucional, está convencido de que las ansias de renovación orgánica que sienten algunos dentro del PSOE no son ni por asomo una demanda social en estos momentos. La desafección por la política y las dramáticas consecuencias de la crisis pueden haber influido en Griñán, que cree un error que los socialistas, nueve meses después de elegir a su líder, vuelvan a encerrarse en una cápsula para debatir quién pilota la nave. "Los ciudadanos no lo entenderían", dice.
Rubalcaba anunciará la fecha de las primarias en el Comité Federal del 12 de enero, que se convocarán entre las europeas de junio de 2014 y las municipales de mayo de 2015. Griñán respalda esta decisión, sin embargo, fuentes autorizadas del PSOE-A afirman que la dirección andaluza ha pedido a Rubalcaba que el mes que viene despeje si él será candidato a la Presidencia. Sostienen que eso calmaría al partido, pero la decisión es compleja, porque si el cántabro se autodescarta demasiado pronto, como creen algunos dirigentes andaluces, esto podría debilitar su labor de oposición en el Congreso. Rubalcaba sería señalado por el Gobierno como un líder provisional, al frente de una bicefalia de la que aún se desconoce el cabeza de cartel para las generales (noviembre de 2015 si no hay adelanto electoral. Ayer dijo que "Dios dirá" si concurre a las primarias.
Arenas pide a Griñán un modelo territorial y Zoido, que lo olvide
El presidente del PP-A, Juan Ignacio Zoido, y su antecesor, Javier Arenas, participaron ayer en actos separados de partido y cada uno se dirigió a Griñán con un discurso distinto, que enseguida animó a los socialistas a denunciar que estaban incurriendo en “contradicciones”. Zoido, desde San Fernando (Cádiz) hizo un llamamiento al presidente de la Junta para que “olvide su obsesión por el federalismo cooperativo” y con la reforma de la Constitución, que “olvide a Rubalcaba y sus aventuras a nivel nacional” y que empiece a “gobernar para todos los andaluces”. Entretanto, Arenas, en un mitin en Huelva, se refirió al consejo territorial del PSOE, al que acusó de haberse convertido “en una especie de veleta que se mueve bajo la presión de los nacionalistas”, y acto seguido, instó a los socialistas a alcanzar un acuerdo sobre el modelo territorial que va a defender. “Ayer defienden el federalismo asimétrico, luego el federalismo cooperativo, después cambiar la Constitución y al día siguiente que no se cambie, es dramático que los españoles no sepan cuál es el modelo del segundo partido de España”, dijo Arenas. El exlíder del PP-A pidió a los socialistas un consenso por el bien del país.
