El PSOE andaluz dio ayer el visto bueno a todas las listas electorales para el 20 de noviembre remitidas por las provincias con una excepción: Cádiz. La dirección socialista de José Antonio Griñán dejó en aire las listas al Congreso y al Senado elaboradas por esta provincia con una advertencia al secretario provincial del PSOE gaditano, Francisco González Cabaña, al que exigen que deje la alcaldía de Benalup de forma inmediata si quiere optar a un escaño al Congreso. La ejecutiva regional fijó "un plazo de 48 horas".
Este líder provincial ocupa el número tres en la candidatura que encabeza Manuel Chaves. El dirigente gaditano eludió pronunciarse públicamente pero desde su entorno defienden que su voluntad es dejar de ser regidor "cuando se lo pida Ferraz".
Lo que ocurrió es solo la confirmación de la pugna interna que mantienen dentro del PSOE la dirección andaluza y la gaditana. Desde el congreso regional que aupó a Griñán a la secretaría general no han parado de sucederse desencuentros. Un dirigente regional se refería ayer a González Cabaña como "el verso suelto" del PSOE-A. Muchos entienden que el PSOE gaditano se ha convertido en una "isla independiente" dedicada a "torpedear" a Griñán.
Una percepción muy diferente a la que tienen desde la dirección provincial de González Cabaña, donde denuncian una especie de manía persecutoria de la secretaria de Organización y mano derecha de Griñán en el partido, Susana Díaz. En el PSOE gaditano militan nombres de tanto peso como el exvicesecretario regional Luis Pizarro, quien meses atrás dimitió como consejero de Gobernación. Ahora coordinará la campaña electoral en Cádiz.
Versiones hay tantas como interlocutores se busquen. El hecho es que la dirección regional frenó una lista clave y cargada de simbolismo. Por ella concurrió Alfredo Pérez Rubalcaba en las anteriores elecciones. Tampoco es baladí que sea Chaves quien ocupe ahora el puesto de salida.
La lista de Cádiz había sido impugnada por un grupo de críticos con Cabaña y llamados griñanistas. Preguntada sobre el peso de esta reclamación, Díaz señaló: "Toda la documentación que llega a la ejecutiva regional es atendida". La última palabra la tendrá la ejecutiva federal, que es la competente para aprobar las listas. "Ferraz conoce lo que ocurre", puntualizó Díaz.
La número dos del PSOE andaluz recordó que es el propio Rubalcaba el que ha pedido que los alcaldes no vayan en las listas. Además la dirección andaluza subraya que acaban de aprobar, en mitad de una gran bronca con el PP, una reforma legal en el Parlamento andaluz para impedir que los alcaldes sean diputados. Hay otra alcaldesa: la regidora de Albaida del Aljarafe (Sevilla), Soledad Cabezón, número tres por Sevilla. Díaz aseguró que hoy mismo presentará su renuncia.
La ejecutiva vivió un debate sobre la presencia de mujeres en las listas, después de que haya socialistas molestas porque consideran que se están dando pasos atrás. Clara Aguilera o Amparo Rubiales se pronunciaron en esta línea, según fuentes de la reunión. La secretaria de Igualdad, Trinidad Muñoz, o Verónica Pérez también tomaron la palabra, lo mismo que Griñán, preocupado -informaron algunos asistentes- por un retroceso en "conquistas clave". Los socialistas andaluces impulsaron una ley pionera que obliga a que las candidaturas al Parlamento sean cremallera (hombre-mujer). No ocurre así en el Congreso y el Senado. De las listas al 20-N no son cremallera Málaga, Sevilla y Cádiz.
