Pizarro dijo que "está en su derecho de preguntar tanto a los alcaldes como al presidente de la FAMP qué ha pasado en el debate de Antequera". Opinó que "no era necesario" que Toscano pusiera su cargo a disposición de la FAMP porque "los alcaldes socialistas en ningún momento han puesto en duda su labor". "No hay problemas entre Toscano, el Gobierno andaluz y el PSOE", insistió.
El consejero, artífice de las leyes locales, repitió que "todo se trata de una mentira y una manipulación del PP-A", un partido que, a su juicio, no apoyará las normas en el Parlamento porque a su líder, Javier Arenas, "no le interesa que la imagen de Andalucía se fortalezca". No obstante, admitió que "existen asuntos pendientes que hay que negociar" en la Cámara y destacó la posición "abierta y flexible" de la Junta.
Desde el PSOE-A también el secretario de Organización, Rafael Velasco, aseguró el "total respaldo" del partido al trabajo realizado por Toscano "sin ningún tipo de dudas". Explicó que habrá un "diálogo permanente" para evitar que dimita. Todo ello sin dudar, según subrayó, de que los alcaldes apoyarán con "contundencia" las dos leyes "más avanzadas que hay", en referencia a las leyes de Autonomía Local y de Participación de los entes locales en los tributos de la comunidad. También el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, resaltó que las dos normas andaluzas son "muy importantes" en el diseño nacional para los próximos 25 años.
La oposición no piensa pasar página. Javier Arenas pidió al presidente andaluz, José Antonio Griñán, que "no manipule ni oculte" la verdad sobre unas leyes locales que van "contra" los ayuntamientos. El coordinador de IU, Diego Valderas, dijo que si Griñán persiste en su "traducción" de lo ocurrido en la última reunión de la FAMP e insiste en que no hubo rechazo, exigirá que se haga público el audio del encuentro.