El PSOE andaluz, la federación más numerosa y la que más votos ha aportado al futuro secretario general, Pedro Sánchez (61%), no se va a posicionar explícitamente en contra de que las primarias para la elección del candidato a la presidencia del Gobierno sean dentro de cuatro meses, como estaba previsto, pero la ejecutiva regional dejó entrever ayer que su posición es claramente contraria a celebrar las primarias en noviembre, y que la prioridad del partido ahora, tras muchos días centrado en el debate interno, deben ser las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015. «Las municipales siempre han supuesto un antes y un después en la vida política, el principio de una nueva etapa. Estas elecciones son vitales para el partido y su proyecto de España», dijo el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo.
Horas después de ser elegido nuevo secretario general por la militancia, Sánchez se reunió ayer en la sede del PSOE en Madrid con Susana Díaz, presidenta de la mayor federación, «referente interno» del partido, en sus propias palabras, con quien estuvo unos 50 minutos. Luego recibió o habló por teléfono con el resto de barones regionales, pero ni el PSOE andaluz ni el propio Sánchez han disimulado el peso específico que tendrá Díaz en el timón de mando del nuevo PSOE, aunque ella misma no vaya a estar en la ejecutiva porque no lo desea.
Lo más urgente ahora es resolver el problema de las primarias. El mensaje oficial del PSOE-A es que la fecha debe decidirse «entre todos» en el marco del nuevo comité federal, máximo órgano entre congresos, cuyos miembros serán elegidos en el congreso extraordinario del 26 y 27 de julio. Cornejo sugirió que el nuevo secretario general tendrá que pactar la fecha con los candidatos a alcaldes, «cuya preocupación principal es que a partir de septiembre se empiecen a preparar las municipales». A la enésima pregunta sobre si el PSOE-A defiende un aplazamiento de las primarias hasta después de estos comicios, el número dos de los socialistas andaluces zanjó el tema: «Si estuviéramos tan de acuerdo en celebrar las primarias en noviembre, no estaría diciendo todo lo que estoy diciendo».
El PSOE ha puesto el listón muy alto en las municipales de 2015: o suponen el inicio de la recuperación socialista, que condicione las siguientes citas con las urnas, o se arriesgan a otros cuatro años en la oposición. Esta lectura tiene interpretaciones distintas, según se mire desde Madrid o desde Andalucía, porque los socialistas andaluces ya rompieron la tendencia de derrotas electorales en las europeas. El PSOE-A perdió 300.000 votos, pero logró superponerse al PP por diez puntos, y el partido cerró filas en torno a Díaz, cuyo liderazgo hoy es incuestionable. Pero cuando se celebren las próximas municipales, Pedro Sánchez apenas llevará diez meses en el cargo. Si los socialistas ganan, puede afianzar su liderazgo. Si pierden o no crecen tanto como esperan, algunos dirán que es pronto para atribuirle la derrota al nuevo secretario general, y otros pensarán que el revulsivo que necesita el PSOE aún no ha llegado y empezarán a cuestionar al nuevo líder. Sobre la hipótesis de que en ese momento Díaz reaparezca en el plano nacional, decida optar a las primarias una vez aplazadas convoque elecciones anticipadas y concurra como candidata a las generales de 2015, Cornejo remachó que no hay «ninguna probabilidad» de adelanto electoral, y que Díaz «está centrada al cien por cien» en Andalucía.
Nombres. Se da por hecho que en la nueva ejecutiva de Sánchez se sentará un andaluz en un puesto privilegiado, aunque Cornejo se esforzó en remarcar que no condicionarán al nuevo líder. «No vamos a poner sobre la mesa ni puestos ni nombres. No se va a condicionar el apoyo a la nueva ejecutiva en ocupar uno u otro puesto. Ni el 2, ni el 3 ni el 4», dijo. Interrogado por tantos futuribles a corto, medio y largo plazo, Cornejo terminó por parafrasear al entrenador del Atlético de Madrid, Diego Cholo Simeone: «Vamos a ir pasito a pasito, a lo Cholo».
Los socialistas andaluces descartan «condicionar» su apoyo a la nueva ejecutiva, pero de alguna manera ya está condicionada. Díaz allanó la candidatura de Sánchez al decidir que no se presentaría, y en la consulta que acaba de producirse: 20.887 militantes andaluces de los 34.228 que fueron a votar (61%) apoyaron al diputado por Madrid, frente al 22,75% que apoyó a Eduardo Madina, y el 15,69% a José Antonio Pérez Tapias. «Ha quedado clara la identificación de los cuadros y la dirección del PSOE-A con la militancia», dijo Cornejo, para luego matizar: «No tanto en el objetivo de un determinado candidato, sino en la participación y el compromiso» con la consulta (en Andalucía ha votado casi un 70% de la militancia).
El 'tour' de Susana Díaz Tras su visita, hace unos días, al presidente de Canarias, Paulino Rivero, la presidenta de la Junta y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, visitará esta semana al líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig (el jueves) y estará en Barcelona el sábado, en la clausura del congreso del PSC que designará a Miquel Iceta como primer secretario del partido, en sustitución de Pere Navarro. El presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno, se refirió ayer a la agenda de Díaz para denunciar el «tour» de la presidenta, «más preocupada por el lío interno del PSOE» que por los problemas que padece la comunidad que gobierna. Los populares mantienen que Díaz quiere «dar el salto» a la política nacional. Los socialistas andaluces defendieron que las visitas de la presidenta a Rivero, en Canarias, y a Puig en Valencia, son invitaciones tras los viajes que éstos hicieron a Andalucía.
