Jiménez ha enviado a Ruz los informes el día que se levanta el secreto de sumario de los ERE
El PSOE-A hizo ayer coincidir la apertura del sumario del caso ERE el mayor fraude de fondos públicos en Andalucía bajo un Gobierno socialista con un golpe de efecto que desvió las denuncias por corrupción hacia el PP-A. El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, compareció a la misma hora en que las partes personadas en el caso ERE acudían al juzgado a recoger la voluminosa documentación, y anunció que su partido remitirá al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz informes de la Cámara de Cuentas sobre los gastos electorales del PP-A en las tres últimas campañas autonómicas, celebradas en los años 2004, 2008 y 2012, en los que, según Jiménez, aparecieron irregularidades de difícil justificación y distinto calado. El juez Ruz investiga la trama de corrupción de la red Gürtel, vinculada al PP. La semana pasada solicitó a este partido que entregase su cuenta de gastos de representación entre 2004 y 2012, los libros de contabilidad de las sedes de Málaga y Sevilla (entre otras) y el libro de visitas de su sede central en la calle Génova, de Madrid (para verificar las visitas de los ocho constructores imputados). Justo ayer la Audiencia Nacional consumó la expulsión del PP de la causa que también investiga la supuesta contabilidad en B del partido. El PP estaba personado como acusación particular, pero según Ruz su labor hasta ahora ha sido más de defensa que de acusación (sobre todo respecto al extesorero e imputado por malversación, Luis Bárcenas).
El número dos del PSOE-A puso como ejemplo de posibles irregularidades los gastos relativos a la última campaña electoral de 2012, donde el informe de fiscalización de la Cámara de Cuentas recoge la existencia de 30 cheques al portador emitidos por el PP-A, algo que los socialistas consideran sospechoso porque se sitúan en la frontera de los 3.000 euros a partir de la cual la normativa vigente exige su justificación, informa Europa Press. Para Jiménez, el PP andaluz, su presidente, Juan Ignacio Zoido, y su antecesor en el cargo y exsecretario general del PP, Javier Arenas, se sitúan en el ojo del huracán y en el centro de la tormenta del caso Bárcenas. El PSOE sostiene que según los papeles de Bárcenas, los incrementos en los ingresos, que son objeto de investigación por si pudieran haber sido irregulares o ilegales, coincidieron con la llegada de Arenas a la Secretaría General del PP, que tenía una estrecha relación con Bárcenas. Es sospechoso que un partido se dedique a emitir cheques al portador en la frontera de los 3.000 euros, que es la cantidad que se establece por parte de la legislación para identificar al cobrador del talón, insistió Jiménez. En cuanto a los gastos de las elecciones autonómicas de 2008, el PSOE mantiene que en el informe de la Cámara de Cuentas hay un desfase de más de 800.000 euros de difícil justificación, vinculados a la compañía Rialgreen, empresa de Pablo Crespo, uno de los principales imputados de la trama Gürtel.
El PP-A respondió ayer que no tiene ningún problema con que el PSOE-A envíe al juez Ruz esta documentación. Estamos muy tranquilos, dijo ayer José Luis Sanz, secretario general del partido. La Cámara de Cuentas tiene ya los gastos de las últimas campañas electorales del PP-A, explicó el número dos del partido. Sanz aclaró que ni a la sede del PP de Sevilla ni a Málaga ha llegado aún notificación oficial del requerimiento del juez Ruz
