El debate más esperado por los ciudadanos de Montequinto se produjo el miércoles en el Parlamento Andaluz. La comisión de infraestructuras desaprobó la Proposición No de Ley de soterrar la autovía A-376 por 10 votos en contra y ocho a favor y la postura ambigua del grupo socialista, que se declaró a favor del proyecto.
El diputado socialista José Muñoz introdujo una enmienda a la proposición no de ley presentada por todos los grupos de la oposición. En ella se añadía a la proposición que el proyecto debía hacerse "de acuerdo con el ayuntamiento de Dos Hermanas" y se mostraban conforme al soterramiento de la carretera de Utrera sólo "en los accesos a Montequinto y Condequinto".
En su intervención, el parlamentario consideró que la proposición "había cometido la osadía" de añadir datos técnicos que no competían al Parlamento, y que "en esencia" estaban de acuerdo con el soterramiento de la autovía siempre que hubiera un estudio que lo avalara.
A esto, el Partido Andalucista (PA) introdujo nuevas enmiendas a la presentada por el PSOE, ampliando la distancia del soterramiento de los accesos a Montequinto a todo el paso de la autovía por la barriada quinteña.
Finalmente, un defecto de forma provocó la desaprobación del proyecto. La oposición debía aprobar primero la enmienda del PSOE y luego las suyas. Tanto el Partido Popular como Izquierda Unida y PA desaprobaron esta modificación. Por lo que el PSOE desestimó con su mayoría absoluta el soterramiento. En la sala 2 del Parlamento, la votación fue tan caótica que hasta el presidente de la comisión, Juan Antonio Vizcaino tuvo que consultar a un jurista para saber el procedimiento de votación exacto.
La oposición se fue con la sensación de que esa era la estrategia del grupo mayoritario para no aprobar la obra, pero tampoco decir que estaban en desacuerdo. El mismo José Muñoz declaró que estaban a favor, aunque tenía problemas con lo explícito de la ley. Al mismo tiempo comentó que los vecinos de Montequinto no habían acudido a visitar al grupo socialista para pedirles ayuda, y por eso creía que toda esta reclamación "tenía un tufillo político y partidista".
Por contra, Concha Caballero, diputada de IU, le increpó que "no sabía qué tufillo político podía haber cuando la propuesta venía de tres partidos que no tienen nada que ver entre ellos".A la diputada le quedó claro que "El Psoe no tiene voluntad política de atender a los ciudadanos de Montequinto, y por eso se ha inventado esto para no tener que decir públicamente que está en contra", dijo Caballero, lamentándose de que "era una propuesta muy fácil y se han complicado mucho".
Por su parte, el diputado del PP Rafael Salas, declaró que el Parlamento "había desoído a los ciudadanos de Montequinto" y les había dado "la espalda" sin ni siquiera admitir públicamente que no querían soterrar la autovía. Carmen Pinto, del PA, se limitó a lamentarse de que "los habitantes soportarán el ruido, el tráfico y la contaminación durante mucho tiempo".
Para los vecinos, lo que más llamó la atención de la intervención socialista fueron las palabras de Muñoz en referencia al ayuntamiento de Dos Hermanas, diciendo que tenían "algo importante que decir" en este tema, y que "era a ellos a quienes debían reclamar". Ya que tanto los representantes de Montequinto y Condequinto alegaron que han pedido varias reuniones con el consistorio y que han solicitado ayuda a la Junta hasta en siete escritos, todos sin respuesta.
A pesar de la indignación de ambas entidades locales, los vecinos aseguran que seguirán luchando para solucionar el problema de la carretera de Utrera.
