Lo que no quieren son "chapuzas puntuales", según denunciaba ayer David Gómez, miembro de la plataforma en defensa de este emblemático edificio del siglo XVIII que desde 2004 es Bien de Interés Cultural (BIC). Gómez se quejaba de que el agua ha afectado a una zona que comunica la esquina de la plaza con la calle Fray Diego de Cádiz, "en la que ya intervino" el Ayuntamiento. Por eso, reivindicó que "de una vez empiecen las obras de rehabilitación", cuyo proyecto se aprobó hace un año y "ya cuenta con el visto bueno" de la Comisión Provincial de Patrimonio.
Pero, por el momento, la intervención municipal se ha limitado a actuaciones puntuales de mantenimiento y conservación en el edificio como las que han llevado a cabo estos días. El pasado 23 de diciembre, un día después de que los vecinos dieran la voz de alarma sobre los problemas que las lluvias estaban ocasionando a la estructura del edificio, acometió obras de urgencia en las cubiertas y el interior. Asimismo, según indicó ayer Urbanismo en una nota, a principios de año se demolió parte del tejado ya que el deterioro de las vigas provocó su hundimiento.
Poco se sabe, en cambio, sobre la posible fecha de inicio del proyecto para la Casa del Pumarejo, que contempla la rehabilitación de las 19 viviendas existentes y el realojo de los vecinos y locales comerciales en alquiler.
Pero los vecinos no pueden esperar más y para ellos "ya no sirven las excusas", explicaba David Gómez, que recordó que en 2004 -antes de alcanzar un acuerdo con la empresa propietaria, Quo Hoteles Integrados- fue el propio Consistorio el que emitió un informe instando "a su rehabilitación urgente". Por eso, han convocado para el 13 de febrero una manifestación que partirá de la Plaza Nueva y que acabará frente a la Consejería de Cultura.
