Deportes

El Recreativo Su Eminencia, en riesgo de desaparición, pide ayuda

Deberá liquidar una deuda de 2.000 euros para evitar su disolución. La no explotación del Centro Deportivo La Doctora, ahora en manos del IMD, fue el inicio del declive financiero. Compite en Segunda Provincial sénior.

el 01 jul 2013 / 10:00 h.

En plena vorágine de fichajes, el Recreativo Su Eminencia ha emitido una señal de alarma. El club rojinegro, que hoy celebra su 55 cumpleaños, podría desaparecer si no solventa una deuda de 2.000 euros adquirida con la Federación Sevillana de Fútbol y el Instituto Municipal de Deportes. El presidente de la directiva, Miguel Ángel Maldonado, y el técnico del primer plantel, Rafael Méndez, buscan con urgencia un patrocinador principal que el próximo curso asuma un alto volumen de la partida destinada a gastos. La delicada situación financiera se agravó con la disolución de la Junta Rectora de la Instalación de La Doctora, en la que el conjunto periférico ejerce de local. Desde entonces, el Su Eminencia buscó soluciones con el objetivo de paliar la reducción de ingresos por la no explotación de la instalación, ahora en manos del propio Instituto Municipal de Deportes. La deuda actual con el IMD por el alquiler del campo asciende a unos 1.000 euros, cantidad que el gobierno municipal ha permitido pagar a plazos, aunque en Su Eminencia consideran inviable continuar ampliando el déficit ya acumulado. Además, el club rojinegro debe desembolsar un montante similar en las arcas federativas de Tomás Pérez. La Federación Sevillana fue la encargada de evitar una prematura desaparición la anterior campaña. El vicepresidente adjunto del organismo federativo, Rafael Puerto, y Francisco Gradis, secretario, pactaron una serie de pagos a plazos para evitar el desenlace. Sin embargo, el club de Su Eminencia no ha podido cumplir con los plazos pactados y su futuro dependerá del aterrizaje de un mecenas que solvente las deudas contraídas y permita afrontar el próximo ejercicio con ciertas garantías. El Su Eminencia compitió en la 12-13 en el grupo III de Segunda, categoría en la que pretende continuar para evitar su disolución. El cuadro periférico vivió sus últimos años dorados entre 2003 y 2007, en los que enlazó cuatro campañas consecutivas en Preferente, en la que en su día fue un clásico.

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