"Es evidente que, a estas alturas, la calle Betis debería ser peatonalizada como continuación del tramo de San Jacinto, con excepción del acceso a los garajes de residentes, y que Pureza debe considerarse de uso exclusivo para residentes. El espacio entre Pagés del Corro, San Jacinto, Betis y Troya debe estar libre del tránsito de vehículos". Con estas palabras, el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, abre a través de su blog otro debate sobre la reordenación de Triana una vez anunciada la segunda fase que implica la implantación del sentido único en Pagés del Corro, una red de carriles bus tanto en esta vía como en la Ronda de Triana y López de Gomara, y una reforma del viario de Esperanza de Triana.
El planteamiento del alcalde de Sevilla surge a raíz de las conversaciones que se han mantenido en el marco de las jornadas de la movilidad, aunque no ha sido presentado formalmente. No se abordó en la reunión de trabajo celebrada en el distrito Triana en la que estuvo presente casi la mitad del Gobierno local ni se ha traslado al grupo socialista. Es una iniciativa que, de hecho, no se plantea a corto plazo, según confirmaron fuentes municipales, aunque es un debate que se ha llegado a abrir y que el alcalde ha decidido lanzar a través de su blog personal.
Ya en marzo de 2009, el distrito Triana, en colaboración con Emasesa, inició un plan para semipeatonalizar el núcleo histórico de Triana. Se trataba, no tanto de restringir completamente el tráfico, como de reordenar las calles e implantar el modelo de cota cero, por el que no hay distinción entre las aceras y la calzada. La medida afectó a vías tan simbólicas como Fabié, en pleno proceso de reforma para mejorar las redes de saneamiento.
Meses después, durante el pasado verano, la transformación de Triana afrontó un episodio fundamental con la decisión del delegado del distrito de lanzar la propuesta de peatonalizar el tramo de San Jacinto comprendido entre Pagés del Corro y la Plaza del Altozano. Lo que empezó como una iniciativa casi personal desembocó en un debate ciudadano y en un proyecto del Gobierno local que se realizó en dos fases. La primera, el pasado mes de diciembre, cuando se cerró al tráfico esta vía, recientemente reasfaltada. La segunda, cuando a partir del próximo mes de junio la Delegación de Urbanismo acometa las obras de remodelación para transformar completamente una vía que aún no han acabado de ganar los peatones.
Junto a esta medida, se implantaron una serie de reordenaciones viarias para mejorar la movilidad que implicaron, entre otras cuestiones, el cambio de sentido de San Vicente de Paúl, de Castilla, de Procurador, de Antillano Campos y de Manuel Arellano. Aunque el alcalde aseguró el pasado lunes que estas medidas han funcionado "de forma satisfactoria", cinco meses después se ha reabierto el debate sobre la situación de Triana, que ha derivado en una segunda fase de las actuaciones, en este caso centradas en la mejora de la circulación del transporte público.
Para ello se implantará el sentido único en Pagés del Corro, con un carril en contrasentido para autobuses y taxis entre República Argentina y San Jacinto, y se reordenarán la Ronda de Triana y López de Gomara para dejar dos carriles reservados al transporte público, uno en cada sentido de la circulación. De momento, no está previsto avanzar, aunque el modelo puede desembocar en una nueva área peatonal en torno al río.
