Ni cumplió el PSOE ni está cumpliendo ahora el PP. El día que los vecinos de Bellavista estrenen la comisaría de la Policía Local anunciada desde hace ya año y medio cantarán el aleluya. No hay fecha para el inicio de la obra y socialistas y populares protagonizaron ayer un cruce de declaraciones con un hilo conductor: el ya clásico antes de unas elecciones y tú más, o peor.
La visita del portavoz socialista Juan Espadas al barrio fue el detonante de la batalla en forma de notas de prensa. La primera contienda por las fechas incumplidas. Los socialistas denunciaron que el delegado de Movilidad y Seguridad, Demetrio Cabello, se comprometió a que las obras comenzarían en el mes de noviembre y después en marzo, aunque no podrán empezar antes de mediados de julio, ocho meses después de lo comprometido por el dirigente del PP, según el PSOE.
El delegado del distrito Palmera-Bellavista, Rafael Belmonte, estuvo rápido en la réplica: el Gobierno de PSOE e IU anunció "a bombo y platillo" la comisaría el 27 de abril de 2010 y "no han hecho nada en más de un año y medio". "El que no tiene plazos serios es el partido de Espadas, que ahora pretende que se haga en siete meses lo que no se ha hecho en doce años", bombardeó.
Eso sí, el PP flaqueó a la hora de apuntar cuándo podría empezar la obra de la sede policial: "A la mayor brevedad posible". O lo que es lo mismo, que no hay fecha. De noviembre a marzo y de marzo a...
Y del baile de fechas se pasó a la contienda del 25 de marzo. ¿Quién hace electoralismo? ¿Quién utiliza a los vecinos de Bellavista a modo de arma electoral? Según PSOE y PP, el otro. O lo que es lo mismo, los dos.
Según Espadas, el PP tenía sobre su mesa el proyecto de la comisaría y parte del presupuesto necesario porque cuenta con partidas asignadas en 2009 y en 2010, pero "los plazos se les han escapado de las manos".
Según Belmonte, el PSOE hace "trampas con la memoria de los vecinos" mientras él seguirá trabajando, dejándose "la piel las 24 horas, para resolver los problemas de los vecinos" tras las próximas elecciones autonómicas de marzo. Entonces, los talleres del distrito ya estarán funcionando, ya que se pondrán en marcha en los "próximos días" tras los problemas administrativos sufridos porque "no había ni un papel tramitado" por el anterior Gobierno. La mejor defensa es, sin duda, un buen ataque.
Para Espadas, el alcalde ha demostrado su falta de previsión (por no incluir la comisaría en los presupuestos de este año) y de compromiso con el barrio al recortar 141.000 euros las cuentas del distrito para 2012. Y como en la guerra casi todo vale, aprovechó los cambios en las filas enemigas para atacar: "Se ha designado a un nuevo concejal responsable que tendrá que empezar de cero en los problemas del barrio", criticó.
