El Rey Don Juan Carlos asistió a mediodía de ayer a la misa oficiada por Don Pedro de Orleans, tío político del monarca fallecido el pasado 27 de diciembre en Villamanrique de la Condesa. A pesar de estar anunciada su presencia, no asistió la Reina Sofía y sí las hermanas del Rey, Doña Margarita y Doña Pilar.
La plaza que rodea a la iglesia de Santa María Magdalena se llenó desde una hora antes de las 12.30, hora prevista para la llegada del monarca a Villamanrique de la Condesa. Cientos de vecinos del pueblo y de los alrededores acudieron para ver de cerca a los monarcas y sus familiares.
Antes de su llegada aparecieron por la plaza las autoridades civiles y militares, encabezadas por el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, el jefe de la Fuerza Terrestre, Virgilio Sañudo y como representante del Gobierno andaluz, el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña -que departió ampliamante con el cardenal-. Junto a éstos, el alcalde manriqueño, José Solís de la Rosa (PSOE).
Las autoridades fueron recibiendo a los asistentes, encabezados por las hermanas del Rey Doña Pilar y Doña Margarita, acompañada de su marido Carlos Zurita. Tras ellas, los duques de Calabria, el duque de Braganza, Beatriz de Orleans y Victoria de Borbón Dos-Sicilias.
Minutos después de saludar al cardenal que aguardaba en la puerta del templo aparecía por la plaza desde la casa palacio que fuera residencia de Don Pedro y Doña Esperanza -hermana de Doña María de las Mercedes fallecida el 2005- el Rey, que llevaba del brazo a Teresa de Orleans y Braganza, hermana de Don Pedro. Tras ellos los hijos del fallecido, todos de riguroso luto.
En la misa oficiada por el cardenal de Sevilla cantó la coral de San Felipe Neri de Sevilla, que protagonizó una de las anécdotas al llegar hasta la misma puerta de la iglesia en su autobús.
Tanto la entrada como la salida del Rey a la parroquia fue acompañada del aplauso cariñoso de los asistentes que fueron correspondidos con el saludo y la sonrisa del monarca.
