El rey de Bélgica, Alberto II, ha pedido al encargado de formar un nuevo gobierno, el democristiano flamenco Yves Leterme, que prosiga su trabajo, y a los líderes parlamentarios que dialoguen, para superar la grave situación de bloqueo por la que atraviesan las negociaciones.
"El Rey le ha pedido (a Leterme) que continúe su labor con el fin de que pueda constituirse rápidamente un gobierno federal. Ello es importante para el bienestar de todos los ciudadanos de nuestro país, para la credibilidad de Bélgica y su necesaria cohesión", afirma la Casa Real en un comunicado tras una audiencia del Rey con el democristiano flamenco.
El rey recibirá el próximo fin de semana a los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado para pedirles que inicien un diálogo sobre "la continuación de la elaboración equilibrada de nuestras instituciones y el refuerzo de la cohesión entre las comunidades".
Mientras tanto, Leterme, quien se entrevistó hoy por sexta vez con el rey, mantendrá conversaciones bilaterales preparatorias con los líderes de los cuatro partidos que están negociando la formación de una coalición naranja-azul (democristianos-liberales).
Se trata del tercer intento de Leterme de formar gobierno desde que fue designado por el rey en julio pasado.
Estas negociaciones, que comenzaron después de las elecciones legislativas del pasado 10 de junio, están suspendidas desde que los partidos flamencos aprobaran ayer en la Cámara de Diputados de manera unilateral -los francófonos abandonaron la sala justo antes del voto- unas proposiciones de ley que prevén la escisión del distrito electoral de Bruselas-Halle-Vilvoorde (BHV).
Este asunto divide desde hace más de cuarenta años a ambos grupos lingüísticos, pero ha vuelto al primer plano de la política desde que Leterme convirtió una nueva descentralización del Estado, incluida la división de BHV, en una condición imprescindible para que él y su partido, el CD&V, que se presentó a los comicios en alianza con el nacionalista N-VA, participen en el nuevo Ejecutivo.
