El ex agente Lars S.M., el día que fue puesto a disposición judicial como autor del robo.
Casi año y medio después de que el contraanálisis de un alijo desvelara que 150 kilos de cocaína y heroína habían sido robados de la Jefatura de Blas Infante, el caso se ha cobrado su primera víctima: el jefe de la Udyco (la unidad antidroga de la Policía Nacional), quien ha sido relevado de su cargo después de haber sido imputado por "favorecer el tráfico de droga".Fuentes policiales confirmaron ayer que el inspector jefe fue cesado de su cargo el pasado viernes, tras lo que será trasladado a la comisaría de Centro como responsable de la unidad de Seguridad Ciudadana.
Un cambio que, según explicó el secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Manuel Espino, aún no ha sido notificado al mando, que lo "supone y desea" después de haber puesto su cargo a disposición del jefe superior de Policía Nacional en Andalucía Occidental, Enrique Alvarez Riestra.
"Esos puestos son de mucho mérito y para salir de él se exigen una serie de condicionantes, y aunque él entiende la situación, aduce que lo único que ha hecho en 17 años es trabajar, trabajar y trabajar y que el cargo del que se le acusa es completamente descabellado", señaló Espino, quien también insistió en los errores que a su juicio ha cometido Asuntos Internos en el informe en el que se ha basado la juez y la Fiscalía para imputarle.
En dicho documento, los agentes señalaban que el jefe de la Udyco habría "favorecido" al clan de los Barrigas, dedicados a la venta de droga en San Juan de Aznalfarache, lo que fue negado rotundamente por el policía en su declaración ante la magistrada.
Por ahora, el traslado del jefe de la Udyco no se va a hacer efectivo, ya que está disfrutando de unos días de permiso, con lo que la orden se ejecutará cuando se reincorpore esta semana.
La Fiscalía sospecha que el agente pudo pagar favores con droga o no persiguiendo a este clan, con el que trabaja como confidente, lo que provocó que la juez abriera una causa penal diferente a la que investiga el robo en la Jefatura, y en la que el inspector jefe, y dos mandos más de la Udyco, están imputados por "encubrimiento u omisión del deber de denunciar" al existir indicios de que conocieron el robo antes de que se destapara el caso.
Por el robo hay tres personas en prisión, una de ellas el ex agente de la Udyco Lars S.M., cuya esposa también está imputada, aunque está en libertad tras pagar 30.000 euros de fianza.
