Los problemas que arrastran las familias andaluzas a consecuencia de la actual conyuntura económica han estado muy presentes en la misa de pentecostés celebrada este mediodía en el monumento de la coronación de la virgen en el Real de la aldea almonteña. El obispo de Huelva, José Vilaplana, ha destacado en su homilía que el Rocío del año jubilar debe aprovecharse para la "renovación espiritual" de todos los que se acercan estos días al Rocío como una posible salida a la crecientes necesidades que hay en la sociedad actual. Así, ha señalado que la mayoría de los romeros llegan "cargados de preocupaciones" llevando a sus espaldas el peso de los problemas por "la vivienda, el trabajo y el futuro de nuestros jóvenes".
En la celebración en la que también ha estado el obispo emérito de Huelva, ha tenido un especial recuerdo a Benedicto XVI quien concedió el año pasado el año jubiliar mariano coincidiendo con los 200 años del Rocío chico. También ha citado hasta en tres ocasiones al nuevo Papa Francisco así como al ya beato Juan Pablo II.
Durante dos horas que ha durado la misa, el coro de la Hermandad del Rocío de Triana, que también cumple este año los 200 años de la fundación de la filial, ha interpretado una mezcla de las dos misas solemnes que tiene grabadas, en las que no han faltado las conocidas sevillanas de Muñoz y Pabón para cerrar este multitudinario acto en el que la ciudad de Sevilla ha estado representada por el alcalde, Jose Ignacio Zoido y el presidente del consejo de Hermandades y Cofradías, Carlos Bourrellier.
Por último, Vilaplana ha recordado que los jóvenes de Andalucía tienen una cita en el Rocío coincidiendo con las Jornadas Mundiales de la Juventud de Brasil para que aquellos que no puedan realizar el viaje puedan vivir este gozoso acontecimiento junto a la Virgen del Rocío.
