El Sevilla, su dirección deportiva, tiene una clara manera de trabajar en busca de futuros fichajes. De septiembre a diciembre los viajes de los múltiples ojeadores se multiplican. Europa, torneos suramericanos, torneos internacionales, ligas principales, menores... Se peina el panorama futbolístico teniendo en cuenta las necesidades deportivas de la entidad a medio plazo, aunque sin descartar incorporaciones inmediatas si cumplen con el perfil manido de “joven de calidad con proyección”. Llegando al final del año, se seleccionan los principales candidatos para hacerle un seguimiento más exhaustivo y particular, para así decidir si se acomete su fichaje.
Pues bien. El Sevilla tiene un claro objetivo para la próxima temporada, el fichaje de un mediocentro. Este verano ha llegado Didier Zokora, un jugador completo pero de corte más defensivo. En él se ha invertido una importante cantidad de dinero, más de diez millones de euros. Pero para la próxima temporada el Sevilla quiere completar la nómina de futbolistas en la medular. Ya cuenta con Zokora, Renato, Lolo, Duscher y Romaric, además de las apariciones contadas de Fazio, pero no es descartable que la próxima campaña busque un complemento algo más ofensivo y con vistas a los próximos años, ya que tanto Duscher como Lolo acaban contrato en 2011.
Esas posibles vacantes la pretende cubrir el Sevilla con un futbolista de corte más creativo, también completo, pero con juventud. Ante tal nómina de futbolistas se puede contar con un jugador de menos experiencia que se vaya formando poco a poco en el club. Lo reconoció incluso Monchi, que no le hizo ascos a Kuzmanovic, actual jugador del Stuttgart. “Siempre es interesante contar con un jugador joven, con calidad, que pueda ir entrando poco a poco en el equipo y hacerse su sitio”. El problema es que el serbio-suizo quería un equipo en el que fuera titular para tener minutos. Por todo ello, el Sevilla busca un mediocentro para la próxima campaña que entre a competir en primera línea con Renato, con Zokora, Duscher, Lolo y Romaric, que de momento no cumple las expectativas, y está peinando el mercado.
De momento, han saltado a la palestra varios jugadores que pueden cumplir con ese perfil que quiere el Sevilla. Por un lado, en Inglaterra aseguran que el internacional sub 21 Fran Mérida, que acaba contrato con el Arsenal esta campaña y que aún no ha renovado, está en el punto de mira nervionense, aunque su agente asegura no saber nada.Los últimos nombres que han copado protagonismo son los del alemán Mesut Ozil y Ben Arfa. Apuesta más segura parece la del alemán, porque sus prestaciones están siendo mayores y porque su trayectoria, con su juventud, 21 años, es en todo momento ascendente. Ya es incluso internacional absoluto y cuenta con muchas opciones de acudir al Mundial de Sudáfrica. Eso sí, no es el Sevilla el único interesado, pues hay más equipos potentes atentos a sus evoluciones. Más complicado parece el asunto del galo Ben Arfa, sobre todo porque su evolución ha sufrido altibajos y se ha convertido en menos fiable.
Y otro nombre surgido en las últimas horas, según el diario Sport, Willian Borges da Silva, centrocampista brasileño, internacional sub 21, que juega en el Shakhtar Donestk. Aunque el Barcelona, duro competidor, también se ha fijado en él.La dirección deportiva que comanda Monchi, en cualquier caso, tiene abiertos varios frentes, además del europeo. El que resulta más complicado, por precio y prestaciones, es el español.
