Dos victorias consecutivas han situado al equipo de Manolo Jiménez en una posición privilegiada, tercero empatado a puntos con el Valencia, segundo. Después de dos partidos encajando muchos goles (seis), el nivel defensivo vuelve a ser clave y permite ganar sin tener que arrasar en ataque.
Contanto el de este pasado fin de semana ante el Villarreal, el Sevilla suma ya once encuentros manteniendo su portería a cero, algo que ni el líder, el todopoderoso Barcelona, ha logrado. Los de Pep Guardiola lo consiguieron en siete de sus quince partidos, cifra idéntica a la del Valencia e inferior a la del Deportivo (ocho). Con todo, el enorme potencial ofensivo del conjunto azulgrana le permite ganar aunque reciba algún que otro gol.
Los nueve encuentros que el Sevilla disputó sin encajar un solo gol (60% del total) se saldaron con siete victorias, dos empates y ninguna derrota. Cuatro de esas victorias fueron por la mínima (Atlético de Madrid, Almería, Recreativo y Villarreal), lo que viene a confirmar la importancia que ha tenido mantener la portería de Palop imbatida.
Mejorar el nivel defensivo era uno de los grandes propósitos para esta temporada. Basta recordar los números del último ejercicio para ver que era una necesidad acuciante: sólo en 11 de los 38 partidos de Liga no encajó goles. El porcentaje fue del 28,9%, el más bajo desde que el Sevilla regresó a Primera junto al de la campaña 03/04, si bien entonces acabó sexto y se clasificó para la UEFA, todo un éxito tras muchos años sin alcanzarla.
La diferencia es que la pasada campaña, primera de Jiménez, el objetivo era meterse en Champions y al final no se consiguió. Buena culpa de ello la tuvo la sangría a nivel defensivo (49 goles recibidos, a 1,28 de media). Su potencial goleador (75 tantos, a 1,97 por partido, tercer mejor registro de esa Liga) no le sirvió.
Comparando los datos de lo que está haciendo actualmente el equipo y lo que hizo la pasada campaña se extrae una conclusión significativa: con sólo quince jornadas disputadas lleva ya casi el mismo número de partidos manteniendo su portería a cero que en toda la pasada Liga. Los porcentajes hablan por sí solos: 60% en la actualidad y 28,9% en el pasado ejercicio.
Al hilo de los datos expuestos anteriormente sobre el Barcelona, queda claro que para ocupar uno de los puestos de privilegio de la clasificación no es necesario ser el equipo que más veces se va imbatido de un encuentro. De hecho, en la temporada 06/07 el Sevilla mantuvo la portería a cero en 14 de sus 38 partidos (36,8%) y luchó por el título de Liga hasta la última jornada, quedando finalmente tercero.
En todo caso, el análisis viene a poner de manifiesto el nivel defensivo que está dando actualmente el equipo de Jiménez. Ya no sólo se trata de que Palop se marche del campo sin sacar el balón de la red, sino de que el Sevilla es el segundo conjunto mejos goleado tras el Barcelona: 14 tantos (0,93 de media), por nueve de los azulgrana.
Sólo en siete ocasiones a lo largo de toda su historia el Sevilla había recibido menos goles a estas alturas. El mejor registro data de la campaña 05/06, cuando llevaba sólo diez en contra. Lo consiguió con Juande Ramos al frente, aunque en ese momento la clasificación que ocupaba era otra: octavo con 23 puntos, a tres del cuarto puesto. Al final, el Sevilla quedó quinto y se quedó fuera de la Champions por el average con Osasuna.
