Los afiliados del Partido Socialista francés (PS) celebraron el jueves elecciones internas para designar a quien será su líder, en medio de una gran división entre las facciones que lideran Ségolène Royal, Martine Aubry y Benoît Hamon. A las 17.00 hora española, los 232.912 socios del Partido Socialista comenzaron a emitir sus votos en un total de 3.200 mesas para, durante cinco horas, ejercer su derecho a elegir al primer secretario del partido, después de que el Congreso de Reims, del fin de semana pasado, concluyera sin ganador.
Estas elecciones internas revisten un carácter casi de primarias, puesto que quien lidere el partido será probablemente el candidato a los comicios presidenciales de 2012, en los que el PS tratará de tomarse la revancha por la victoria del conservador Nicolas Sarkozy en 2007.
Pero existe el riesgo de que los afiliados socialistas necesiten ir a una segunda vuelta, el viernes, para designar al líder de la primera formación de la oposición en Francia. La ex candidata a la Presidencia de la República -una Ségolène Royal que suscita gran oposición dentro de sus propias filas, aunque se hizo con la mayoría de votos para su propuesta de orientación del partido- es sólo ligera favorita, pues el 6 de noviembre alcanzó un modesto 29,08% de apoyos.
Tampoco la alcaldesa de Lille, Martine Aubry (con el 24,32%), ni el eurodiputado Benoît Hamon, que logró el 18,52% para sus planteamientos de dirección del partido, suscitan apoyos claramente mayoritarios. No obstante, en las horas previas a la votación, las dos candidatas se dedicaron a lanzar mensajes de seducción para integrar al tercer aspirante en el futuro equipo ganador.
