El temporal que azota Andalucía desde hace unos 20 días aún no ha remitido, pero la Junta ya hace números para calcular el dinero que tendrá que liberar para reparar daños. Las ayudas a los municipios más afectados por las lluvias se conocerán previsiblemente el próximo martes, una vez que el Consejo de Gobierno evalúe los perjuicios. El presidente andaluz, José Antonio Griñán, citó ayer en la Casa Rosa a cuatro consejeros para analizar los efectos del temporal y preparar la respuesta de la administración. De momento sólo se conoce una medida: los 60 millones que la Junta destinará para arreglar de manera urgente una docena de carreteras andaluzas, las más perjudicadas por el mal tiempo. En ellas ya se ha actuado de emergencia, pero es necesario mejorarlas para evitar que se repitan los desperfectos.
Los puntos más conflictivos se ubican en algunos tramos de la A-92, de las Alpujarras granadinas y de Cádiz, el puente de Los Calvos en Almería, el de Marchena y la N-630 a la altura del Castillo de las Guardas (Sevilla). La consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, explicó que las carreteras andaluzas -21 permanecían cortadas ayer- han mostrado "un buen comportamiento" ante la magnitud del temporal. Cifró en 704 las incidencias en el asfalto de las cuales, aseguró, el 98,29% se resolvió de inmediato gracias a que los efectivos de su departamento "han trabajado las 24 horas del día". Ahora los esfuerzos se centran en retirar la nieve con 5.430 toneladas de sal.
La cara más amarga del temporal fue sin duda la muerte el jueves de una mujer en Valderrubio, que ayer recibió sepultura. La Junta baraja intervenir en el barranco de Escóznar, que fue el causante de la riada que provocó el fallecimiento de la anciana tras inundarse su casa. Ayer perdió la vida una persona tras caer su coche a un arroyo cercano a una carretera de Jaén capital. Son muchos los ayuntamientos que están asesorando a sus vecinos sobre las ayudas que podrán solicitar y ya hay varios consistorios que pedirán al Gobierno ser declarados zona catastrófica, como Valderrubio, Almonte o Isla Cristina (Huelva). Las lluvias provocaron desalojos en 21 municipios andaluces y en total el 112 recogió 7.321 incidencias en la comunidad. El titular de Gobernación, Luis Pizarro, destacó la "excelente" coordinación de todas las consejerías.
Aunque en un principio las lluvias vinieron bien al campo, el exceso de agua lo ha convertido en el gran damnificado. El olivar y los cultivos hortofrutícolas son los más afectados. La consejera de Agricultura, Clara Aguilera, calculó -contando la superficie agraria que está asegurada- que hay 6.566 hectáreas dañadas y que entre el 20% y el 30% de la aceituna se ha caído al suelo, lo que mermará la calidad del aceite. Aunque descartó ayudas directas, señaló que está hablando con el Ministerio para preparar un nuevo Real Decreto que dé beneficios fiscales a los perjudicados. También se estudia que las paradas obligadas de los pescadores por el mal tiempo puedan computar dentro de las paradas biológicas previstas en los planes de gestión del sector.Los pantanos son los mayores beneficiados por unas lluvias "históricas", según la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo. Los embalses están al 65% de su capacidad (algunos al 84%) y el abastecimiento de agua está garantizado para al menos dos años.
