El agua del mar inundó esta mañana, a la hora de la pleamar (6.00), la práctica totalidad del casco urbano de Ribadesella, en niveles que según estimaciones, pudieron alcanzar el medio metro en algunos puntos, y penetrando en varios comercios. Los principales daños se observaron por el momento en algunos chalés cercanos a la playa, cuyos cierres fueron derribados, así como la barandilla del paseo marítimo, que también se vino a abajo.
El concejal de Obras y Servicios, Juan González Martino, explicó en declaraciones a Europa Press que no era la primera vez que ocurría, pero que no pasa con mucha frecuencia. No obstante, incidió en que la inundación "no fue muy grande". En estos momentos, ya no hay agua por las calles, aunque sí suciedad y restos de maderas flotantes de la marejada. El Ayuntamiento teme que la situación se repita en la pleamar de esta tarde, por lo que se cerrará el tránsito a los coches en las zonas inundables.
Según parece, pese a que el coeficiente de la marea no era muy alto, se dio la conjunción de tres factores: la pleamar, un caudal del río considerable y mar de fondo con olas de unos ocho metros.
Así, "oleaje sobrepasó el muro del puerto y el agua llegó a las calles del casco urbano de Ribadesella", afectando principalmente a al paseo de la Playa y la Gran Vía, entre otras zonas. "El agua entró en algunos establecimientos, y se provocó algún desperfecto material", explica el edil, que donde mayores daños observó fue en "el paseo de la playa". En este punto, los maderos que había en la arena traídos por marejadas anteriores fueron arrastrados por el oleaje, y causaron destrozos en la valla y en algún muro de los chalés que están en primera línea. En uno de ellos, el cierre fue derribado por completo.
En este punto, el final del paseo de la playa, en estos momentos "no se puede transitar ni a pie, y no tiene mucho sentido proceder a la limpieza porque", según recuerda el edil, "para esta tarde, a la pleamar de las 18.25, las previsiones no son nada halagüeñas".
Así, el Ayuntamiento está "a la expectativa para ver si ocurre lo mismo", señaló el edil. Como primeras medidas ya se ha avisado a todos los comercios para que pongan algún tipo de contención que evite la entrada de agua, y se cerrará al tránsito de vehículos por la tarde en las zonas inundables, pues "dicen que algún coche llegó a flotar y que lo movió el agua".
Hasta el momento, se desconoce si hay vehículos dañados, pero muchos de ellos a primera hora de la mañana presentaban las ruedas por debajo del nivel del agua.
EL RÍO PILES EN GIJÓN SE DESBORDA
El río Piles de Gijón se ha desbordado parcialmente debido a la conjunción del fuerte oleaje con el horario de la pleamar y el Paseo del Muro tuvo que ser cortado en distintos tramos del mismo durante la madrugada y la mañana de hoy, según ha informad la Policía Local.
En la zona de las escaleras 9 y 10, se produjeron desperfectos en unos 15 metros de barandilla que resultó arrancada, así como dos farolas, y otro mobiliario urbano, como bancos, papeleras y zonas ajardinadas. Numerosas baldosas han resultado también dañadas, así como uno de los módulos de la caseta de salvamento.
Asimismo, en la zona de las escaleras 18 y 19, el temporal arrancó otras dos farolas ornamentales así como sus pilares respectivos de sustentación y más baldosas. De igual forma, durante la noche la Policía Local también retiró los árboles caídos por el temporal.
El fuerte temporal de oleaje y viento registrado esta pasada madrugada en San Sebastián ha provocado diversos daños materiales en la ciudad, entre ellos un socavón en el Paseo Nuevo que permanece cerrado.
Según han informado fuentes del Consistorio donostiarra a Europa Press, las olas han provocado un socavón en la carretera del Paseo Nuevo y técnicos municipales se encuentran recorriendo el litoral para valorar los daños que hay para elaborar un informe sobre los mismos.
Además, han apuntado que, al parecer, el oleaje también ha dañado el petril de la playa de Ondarreta, porque el agua ha entrado hasta los jardines adyacentes.
OLAS DE 10 METROS EN GALICIA
La influencia de una profunda borrasca en Galicia que mantiene en alerta roja a la costa gallega provocará olas que superarán los diez metros de altura en las próximas horas y que irán disminuyendo por la tarde, pero siempre "superando los siete metros" de altura.
"Hay un punto de preocupación" y "un momento particularmente peligroso", señala Juan Taboada, experto de Meteogalicia. Según ha explicado en declaraciones a Europa Press, esta situación se produce por el fuerte oleaje causado por la influencia del viento local, "muy intenso y que ayer superaba los 100 kilómetros por hora", sumado a rachas del noroeste de Islandia, con olas que llegan en forma de mar de fondo.
En concreto, se trata de una borrasca "muy profunda" que en su inicio fue una "ciclogénesis explosiva" generada entre Islandia e Irlanda. El adverso meteorológico, cuyo centro alcanza los 970 milibares, se desplazó hacia el sur y se sitúa actualmente en el Golfo de Vizcaya.
En tierra, la situación "irá mejorando poco a poco" durante el día aunque se mantiene la alerta amarilla por viento, que podría alcanzar los 100 kilómetros por hora en las provincias de A Coruña y de Lugo, pero que amainará durante la tarde.
Asimismo, la lluvia representará "un factor de riesgo a mayores" ya que, "aunque está por debajo de los umbrales peligrosos", su intensidad será "bastante fuerte" y podría "reducir mucho la visibilidad" tanto en el mar como en la carretera.
DESTROZADA LA BALAUSTRADA DEL PASEO DE A CORUÑA
Por su parte, el fuerte oleaje ha destruido hoy unos 100 metros de la balaustrada de piedra del paseo marítimo de A Coruña, han informado fuentes de la Policía Local.
El temporal ha provocado daños a la altura del Milenium y de la Avenida de San Roque de Afuera, así como en la zona del colegio de las Esclavas y la fuente de las Catalinas de A Coruña. Además de llevarse parte de la balaustrada, el oleaje derribó también algunas farolas y afectó a varios bancos ubicados en la zona.
Entre las cinco de la madrugada y las nueve menos cuarto, la Policía Local ha inhabilitado para el tráfico rodado el carril que discurre más próximo al mar, desde la Torre de Hércules al Monte de San Pedro.
En la costa de Lugo, otra de las zonas más afectadas, el temporal rajó el muro del espigón del puerto de Burela, levantó parte del suelo del muelle y un barco se empotró en otro.
En el puerto de San Cibrao, el fuerte oleaje hizo que desapareciera la mitad de la escollera de la parte posterior del espigón, por lo que el temporal entró directamente en el puerto y dejó "totalmente desechas" tres casetas de los marineros, según comentó a EFE el Patrón Mayor, Javier Sánchez.
Fuentes de MeteoGalicia explicaron que la jornada de hoy se caracterizará por un temporal duro en el mar y una situación desapacible, propia del invierno, en tierra, donde se mantiene una alerta amarilla, con vientos de 70 a 80 kilómetros por hora y chubascos intermitentes, sobre todo en la mitad norte, en que serán más importantes que ayer, por la presencia de aparato eléctrico derivado de la bajada de temperaturas.
En el mar, sin embargo, la situación seguirá siendo de temporal duro, impracticable para cualquier faena, por lo que la flota se mantiene amarrada y se mantendrá la alerta roja durante toda la jornada.
MeteoGalicia informó de que la suma del viento y el mar de fondo provocará la presencia de olas que en mar abierto llegarán a los 10 metros. De hecho, a 20 millas de Cabo Vilano se ha registrado una ola de 11,6 metros.
LA PLAYA DEL SARDINERO, EN SANTANDER, ACORDONADA
La Policía Local de Santander mantiene desde esta noche acordonada la zona entre el Parque de Mesones y el hotel Chiqui, en El Sardinero, por el temporal de lluvia y viento, que ha destrozado entre 40 y 50 metros de la barandilla decorativa de este paseo marítimo.
Según ha informado a Efe el Ayuntamiento de Santander, los bomberos y la Policía Local se encuentran desde esta madrugada en la zona, ya que la arena de la playa ha llegado a la carretera y dos edificios están anegados por el agua, aunque no hay heridos.
Los bomberos de Santander achican agua en los bajos del antiguo edificio María Isabel, que están inundados, y también en el hotel Chiqui, aunque en este establecimiento los daños son menores.
Los efectivos de emergencias también se encuentran retirando árboles y objetos que ha arrastrado o roto el temporal, como algunos bancos y papeleras de la zona.
También están cerrando el paso a peatones y vehículos, excepto a los vecinos de la zona, ya que se espera que la situación pueda agravarse a partir de las 16.00 horas, cuando comienza la pleamar.
En la zona sólo ha tenido que retirarse un vehículo, debido a que el paso a coches, excepto de vecinos, está cortado desde ayer, y tampoco se permite aparcar en todo el paseo de la segunda playa de El Sardinero.
LA FLOTA DE CÁDIZ, AMARRADA
La flota pesquera de la provincia gaditana permanece este martes amarrada a puerto debido a las condiciones meteorológicas adversas, según han confirmado a Europa Press desde las distintas cofradías de pescadores.
De este modo, las flotas pesqueras de Algeciras, Barbate, La Línea de la Concepción, Tarifa, Sanlúcar de Barrameda y Conil de la Frontera permanecen amarradas a puerto, según han indicado a Europa Press desde sus respectivas cofradías.
Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología , consultada por Europa Press, tanto en aguas costeras de Tarifa como en las de Algeciras y Ceuta sopla el viento del oeste con fuerza siete a ocho, amainando a fuerza seis al final. Se prevén intervalos de visibilidad regular por aguaceros, siendo el estado de la mar de mar gruesa con áreas de muy gruesa hasta por la tarde.
En aguas costeras de Cádiz sopla el viento del oeste con fuerza seis a siete, rolando a noroeste por la tarde y amainando a fuerza cinco al final. Prevé también intervalos de visibilidad regular por aguaceros, siendo el estado de la mar de mar gruesa, disminuyendo a fuerte marejada al final.
Finalmente, la previsión en aguas costeras de Trafalgar es de viento del oeste de fuerza siete, rolando a noroeste por la tarde y amainando a fuerza cinco a seis al final. La Agencia Estatal de Meteorología también prevé intervalos de visibilidad regular por aguaceros, siendo el estado de mar de mar gruesa, disminuyendo a fuerte marejada al final.
VIENTOS FUERTES EN JAÉN
El viento ha alcanzado en la provincia de Jaén los 68 kilómetros por hora en la tarde del pasado lunes, según los datos recogidos en el Observatorio de la Universidad, provocando en la capital 14 intervenciones para subsanar problemas con algunas ramas caídas y diversos elementos de mobiliario urbano. Durante todo el lunes se recibieron diez avisos en el teléfono de Emergencias en la capital.
Desde las 8,00 horas de este martes, el centro de Emergencias 112 ha recibido otras diez llamadas realizadas desde la capital de la provincia, Castellar, Andújar y Linares, todas advirtiendo de inminentes caídas o desprendimientos de vallas, toldos, señales de tráfico, cornisas, antenas, etcétera, sin tener que lamentar ningún tipo de daño personal.
Durante todo este martes, los parques de la ciudad permanecerán cerrados al público, medida que se ha adoptado en base a las fuertes rachas de viento que continuarán soplando durante todo el día.
La alerta amarilla seguirá activada hasta las 0.00 horas de este martes, pudiendo alcanzarse rachas máximas de hasta 75 kilómetros por hora, según la Agencia Estatal de Meteorología y el 112.