El famoso tridente del Betis, ese trío de atacantes compuesto por Emana, Rubén Castro y Jorge Molina, consiguió el domingo un hito inédito en lo que iba de temporada: todos marcaron algún gol. Es la primera vez que eso ocurre y el resultado fue que el conjunto de Heliópolis volvió a golear después de dos meses sin dar esa alegría a sus aficionados. El camerunés, el canario y el alcoyano pusieron así el broche a una buena semana para el equipo en general y para ellos en particular, porque antes de esos tres partidos ante los tres últimos de Segunda todos ellos andaban en plena sequía.
Rubén Castro consiguió frente al equipo de su vida su decimoquinto tanto liguero de la temporada. El pichichi verdiblanco llevaba siete jornadas sin marcar, desde que convirtió un penalti ante el Alcorcón el 15 de enero, y no hacía una diana en jugada desde el 18 de diciembre en Tenerife. Emana, por su parte, acumula ya once goles, cinco de ellos de penalti, como los dos últimos, los únicos que ha logrado en 2011; precisamente desde la visita al Heliodoro no marca en jugada. Jorge Molina, por último, ha sido quien más provecho ha sacado de la intensa semana pasada, con tres goles en total que lo llevan hasta los diez en total; el pichichi en vigor de la división de plata también terminó en Ponferrada con una racha de casi tres meses sin hacer un gol que no fuese de penalti (desde el 11 de diciembre contra el Córdoba).
El tridente ha marcado cinco de los siete goles del Betis en los tres últimos partidos y ahora suma 36 en total. Es decir, más que diez conjuntos de Segunda: Cartagena (35), Villarreal B (33), Salamanca (29), Elche (28), Recreativo (28), Tenerife (28), Huesca (25), Nástic (24), Ponferradina (21) y Albacete (19).