El tripartito -PSC, ERC e ICV- y CiU afrontarán hoy el inicio del pleno extraordinario sobre el Estatut sin haber alcanzado una resolución conjunta en defensa de la norma tras la sentencia del TC, y después del fracaso de la reunión convocada por el presidente de la Generalitat, José Montilla, con los líderes de estos partidos.
El abandono de la reunión protagonizado por el líder de la CiU, Artur Mas, precipitó ayer que el encuentro se saldara con reproches en las propias fuerzas del tripartito y también contra la federación.
En una conversación informal con los periodistas, Mas esgrimió que su salida del encuentro, que duró poco más de una hora, era para "facilitar" un acuerdo de los partidos que apoyan al Gobierno, un acuerdo que, de producirse aseguró que suscribirá.
Cedió así al tripartito la responsabilidad de acordar una resolución, en la que sugirió que se incluya el "espíritu" del lema de la manifestación Som una Nació. Nosaltres decidim (Somos una Nación; Nosotros decidimos).
Por su parte, el presidente de ERC, Joan Puigcercós, criticó a socialistas y convergentes por su "tacticismo político", mientras que el secretario general de ICV, Joan Herrera, lamentó la salida de Mas y le advirtió de que debe ser "un acuerdo a cuatro, y no a tres". El viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, calificó de "decepcionante" la actitud de la federación, lamentando que Mas no haya presentado su propuesta y haya dejado en manos del tripartito el pactar una resolución unitaria de rechazo a la sentencia del Tribunal Constitucional (TC).
Los partidos, sin embargo, siguen abiertos a pactar una resolución unitaria y se emplazaron para hoy en el Parlament para seguir negociando. Fuentes de Presidencia consultadas por Europa Press explicaron que Montilla no da la negociación por perdida.
Ante este escenario, el Parlament celebrará hoy el pleno monográfico sobre la sentencia del TC sobre el Estatut con la incógnita de si CiU, PSC, ERC e ICV-EUiA lograrán pactar una resolución unitaria de rechazo y una hoja de ruta sobre las medidas que se deben adoptar tras el fallo.
Fue el presidente de la Generalitat quien solicitó este debate el lunes argumentando que el fallo del Alto Tribunal "significa un hecho de profunda gravedad que exige ser analizado, debatido, y replicado por las instituciones" que representan el autogobierno de Cataluña.
Del malestar de los partidos catalanes y de la ciudadanía catalana no es ajeno el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien en su réplica en el debate del estado de la nación a la portavoz de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, reiteró en que acata y "hará cumplir" la sentencia del TC sobre el Estatut, pero, eso sí, advirtió de que no se les puede "tapar la boca" a los que "se sienten como nación". En otro momento, Zapatero reafirmó que desde que él gobierna el desarrollo de la "España autonómica plural" ha sido "constante" y ha avanzado "dentro de la Constitución" bajo el convencimiento de que "España es más fuerte en tanto en cuanto procure que la mayoría de las Comunidades Autónomas se sientan vinculadas al proyecto común".
Además, para intentar acercar posturas con el presidente catalán, Zapatero recibirá a Montilla, el lunes o el martes en el Palacio de la Moncloa, según informaron fuentes del Ejecutivo que precisaron que la reunión será "privada". Eso implica, según la misma versión, que no está previsto que Montilla comparezca en la Moncloa para informar del encuentro, como suelen hacer los presidentes autonómicos cuando mantienen reuniones formales con Zapatero. El propio Montilla fue quien reveló esta semana que Zapatero le llamó tras la manifestación del sábado en Barcelona en defensa del Estatut.
