La comarca del Aljarafe encierra muchos tesoros, tantos que son merecedores de ser contados por sus moradores. Los blogs son receptores de las múltiples andanzas de los aljarafeños. De ellos toma buena nota José Rodríguez Polvillo, responsable de Blogueros del Aljarafe, un directorio con más de 500 blogs de una treintena de municipios. Su cuenta de twitter (@BlogsAljarafe) aglutina más de 1.500 seguidores.
¿Qué cambiaría de Twitter? Aunque haya quien no le dé importancia, le pondría un corrector de ortografía. Duelen los ojos al leer algunos tuits. jejeje.
¿Qué cambiaría de España? Me gustaría que no estuviésemos siempre mirándonos el ombligo y cuestionándolo todo, hasta las mismas bases. Así es imposible avanzar.
¿Qué cambiaría de Sevilla? Sevilla es un trasunto de España. Se le puede aplicar el mismo criterio.
¿Qué no diría en las redes sociales? No hay que decir nunca algo que no dirías en público. Lo estás diciendo en público aunque no lo veas.
¿Cuál cree que ha sido su mejor tuit? Las redes deben servir para ayudarnos, así que me quedo con uno que pedía un donante de médula para una niña del Aljarafe.
¿Cuál ha sido su tuit más polémico? Cuando el Sevilla ganó la Europa League, retuiteamos muchos mensajes de alegría. No gustó a algunos, aunque la ocasión lo merecía.
¿Y el más popular más RT? Uno que hablaba de una acción solidaria del aljarafeño Sergio Ramos.
Defina el Aljarafe en 140 caracteres. Me sobran muchos: «La tierra que me apasiona».
¿Cree que el blog sigue de moda? Una vez leí que estar en las redes sociales y no tener un blog es algo así como ser un indigente digital.
¿Me puede citar ilustres aljarafeños que estén brillando en Twitter? Para mí, ilustres son mis amigos, como @podemosjugar, @lapelotadepapel, @bemonsi, @ManuLuqueP, @KikeDiazOliver, @PavonArellano, @muyhistoria y muchos más.
¿Cuál es el blog que más le ha sorprendido en este periplo? Los más sorprendentes son los personales, inclasificables por definición. Tenemos un centenar de este tipo y cada uno sorprende más que el anterior.
¿A qué se dedica cuando no tuitea? Además de estar con la familia y atender al trabajo, me gusta investigar sobre la historia del Aljarafe. Hay un pasado muy rico aquí.
¿Y cuando tuitea? Publicamos principalmente actividades y noticias sobre la comarca. Eso obliga a buscar y seleccionar entre la maraña informativa diaria.
Cosas que no soporta de la vida. No me gusta la falta de seriedad, en especial la impuntualidad, aunque ahora las esperas se aprovechan más gracias a la tecnología móvil.
Un puñetazo que habría que dar sobre la mesa
Quien me conoce sabe que no doy puñetazos en la mesa. Me gusta hablar y encontrar puntos de acuerdo. La imposición no es duradera.
¿Cómo quitarse de las redes? Las redes sociales te las haces tú mismo con cosas que te gustan. Por eso nos divierten. Si te gustan o te aportan algo, ¿por qué quitarse?
¿Cómo empezar? Mirando. Antes de lanzarse a publicar, uno debería pasar un periodo de observación de lo que hacen otros y después decidir si quiere seguir.
¿Qué no diría nunca en un tuit? No se debe tuitear en caliente. Hay que tomar distancia y preguntarse: ¿Me puedo arrepentir en el futuro de lo que estoy diciendo aquí?
Un momento que le haya sorprendido en Twitter. Un familiar de una amiga perdió un audífono y fuimos muchos los que nos movilizamos para ayudar. Me sorprendió gratamente.
Un momento que le haya decepcionado en Twitter. Lamentablemente, bastante a menudo, aunque no es culpa de Twitter sino de tuiteros que se amparan en el anonimato para insultar.
Su refrán preferido Prefiero las frases célebres. Me gusta esta: «No es que el mundo sea peor, es que la cobertura informativa es mejor» (Chesterton).
¿Qué hacemos con el planeta? Cuidar el medio ambiente no está reñido con el progreso industrial y tecnológico. Como siempre, en el término medio está la virtud.
¿Y con los atascos de la A-49? Uff. La ampliación del tercer carril será un desahogo, aunque por el contrario no creo que la Torre Pelli sea una ayuda precisamente.
¿Qué le hace libre? Poder ponerme mis propios límites. Cuando los límites te los pones tú, y no los demás, estás gozando de la mayor de las libertades.
¿Qué está pasando con el trabajo? Hay personas que tienen un concepto del trabajo como algo que te dan, y no como algo que tú te buscas. Ese es uno de los problemas.
¿Cómo arreglaría la economía de España? Igual que hay 46 millones de seleccionadores de fútbol, hay 46 millones de presidentes del Gobierno. Yo no tengo interés en serlo.
