El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha levantado la suspensión cautelar que interpuso contra el decreto que avala a los profesionales de la enfermería para prescribir productos sanitarios y medicamentos no sujetos a indicación médica, según informó ayer la Consejería de Salud. El tribunal lo paralizó a petición del Consejo General de Colegios Médicos por intrusismo.
Las más de 25.000 enfermeras que trabajan en el sistema sanitario público de Andalucía podrán de nuevo desarrollar esta actividad, que "favorecerá una respuesta más ágil, cómoda y segura a los problemas de salud de los ciudadanos", especialmente para los cuidados a domicilio o para quien padece una enfermedad crónica, explicó el departamento que dirige María Jesús Montero. Se prevé que cerca de un millón de pacientes crónicos e inmovilizados podrán beneficiarse de la indicación de fármacos por parte de los enfermeros.
El marco normativo que permite esta práctica, y que fue aprobado por el Consejo de Gobierno, establece que los profesionales de enfermería pueden indicar a los pacientes el uso de 96 medicamentos comercializados en 400 presentaciones diferentes. Entre estos fármacos se encuentran antiácidos, laxantes, medicamentos para el dolor y la fiebre, antiinflamatorios, vitaminas o antihistamínicos. También se les permite recetar productos sanitarios como los para el cuidado de las heridas (vendas, gasas o apósitos estériles) o la incontinencia urinaria y podrán participar en cirugía menor ambulatoria.
