El Consejo de Gobierno de la Junta ya declinó en su día la petición porque "no había razones de orden geográfico, demográfico o económico" que lo justificasen. De igual manera lo ha entendido el TSJA, que ha dado la razón, una vez más, a Carmona. La pretensión visueña pasaba por extender su término en 5.145 hectáreas. Así, su territorio aumentaría hasta la Nacional IV por el norte, la vereda de Alcaudete por el este y el cauce del Salado por el sur. Una iniciativa que los carmonenses no estaban dispuesto a permitir: al poco de comenzar el proceso, la Junta recibió 4.000 firmas de vecinos y el rechazo de más de 50 asociaciones locales.
Ocho años después, el Ayuntamiento de Carmona acogió la noticia con alegría. "Estoy satisfecho porque la petición carecía de fundamento", afirmó ayer su alcalde, Antonio Cano (PSOE). También fue bien recibida por la oposición. De hecho, el primer rechazo municipal vino bajo mandato de Sebastián Martín Recio (IU). En la misma línea se ha mostrado siempre el Partido Popular.
En el otro lado está El Viso del Alcor. Su alcalde, Manuel García (PSOE), indicó que los abogados del Ayuntamiento ya "estudian la resolución para recurrirla o, en su defecto, presentar otra solicitud". El alcalde afirmó que, si se sigue adelante "buscará el consenso con las fuerzas políticas locales". Su intención es presentar una petición "mejor redactada y completa".
Los archivos fechan la existencia del término municipal de El Viso en octubre de 1444. Entonces, Juan Arias de Saavedra aceptó esta extensión tras una complicada negociación con el rey Juan II, si bien el conflicto venía de más atrás. En la guerra civil de Enrique II Trastamara con su hermanastro el rey Don Pedro I, el primero decidió iniciar un expolio como pago a los nobles que le ayudaron y como castigo a Carmona por ser fiel a Pedro I. Así se configuró la extensión de El Viso en 20 kilómetros cuadrados. Ya en 1897, el Instituto Geográfico y Estadístico recoge un escrito en el que se delimitan los dos términos como están ahora.