Uno de los participantes en la visita a un taller de imaginería se aplica con la escofina. / SevillayTú
Florencio Quintero fue el pionero de las rutas nocturnas y culturales por la ciudad, a través de su empresa Conocer Sevilla. Descubierto el filón, aparecieron otras agencias que reforzaron y diversificaron la oferta de las visitas temáticas por casco histórico con propuestas nuevas e ingeniosas, caso de Alminar Servicios Culturales, que innovó entre otras cosas con su curso cofradiero y con la incorporación del Past View, o versión visual de las audioguías: unas gafas con tecnología 3-D que recrean lugares, reproducen acontecimientos o presentan a personajes históricos teatralizados que hacen las veces de guías virtuales. Ahora, una tercera generación del sector, en convivencia con las anteriores (que continúan igual de vigentes y lozanas) apuesta por extremar la vivencia, salir del plano de mero espectador y convertirse uno en protagonista de lo que está viendo: si se visita el taller de un imaginero, se empuña la gubia. Si es un bordador, se prueba con el hilo. Más que ver, hacer. La palabra clave es experiencia, y la empresa que da esta nueva vuelta de tuerca se llama Sevilla&Tú. Su director es Antonio David Gil.
«El turismo es la principal industria de Sevilla en estos momentos», dice Gil, con intención de convertir el mantra en un reto. «Desde la distintas instituciones, locales, provinciales, regionales y nacionales, se está haciendo foco en el desarrollo de nuevas opciones de ocio en nuestra ciudad y aunque hay mucha oferta donde elegir, es cierto que, por ahora, el flujo de visitantes permite mantener todas esas opciones activas. Creemos que lo importante, es diferenciarse de los demás en tus servicios turísticos y poner en valor cada producto, con calidad en todas las fases del mismo. Así, habrá sitio para todos y los visitantes se sentirán satisfechos. Afortunadamente, hay empresas en la ciudad con años de experiencia, que mantienen un alto nivel de calidad en sus servicios, con precios competitivos y personal implicado y profesional. Profesionalización y especialización, esas son las claves». Planes tienen unos cuantos. «Actualmente, tenemos disponibles experiencias en talleres de imaginería, bordados, cerámica y orfebrería y estamos desarrollando nuevos servicios y llegando a acuerdos con otros talleres artísticos de Sevilla. Uno de nuestros objetivos es cubrir toda la amplia gama de artesanía artística de la ciudad, con siglos de historia. Por otra parte, vamos a lanzar otros tres productos, relacionados con la ópera, el toreo y un par de rutas muy divertidas por la ciudad, entre mayo y junio». Como siempre que se trabaja en la calle y con personas, las anécdotas no tardan en presentarse. «Por ejemplo, en una experiencia en un taller de cerámica artística, una persona no quería sostener un azulejo original del siglo XVI, por temor a que se le cayera y se rompiera. No fue posible que lo cogiera, a pesar de los intentos del maestro ceramista. En otra ocasión, una persona nos comentó que el día después de haber vivido una experiencia con nosotros en un taller de imaginería, había vuelto a visitar el taller, para hablar con el maestro. Se quedó maravillado y quería más. Por último, con un pequeño grupo familiar, recorriendo una zona del centro de Sevilla, una chica de unos 16 años no paraba de hacer preguntas a nuestra guía, de esto y de aquello. Al finalizar la experiencia, le confesó que quería formarse como guía turístico y que estaba encantada con las explicaciones que le estábamos dando. Deseamos que se convierta en una excelente guía turística». Pero la duda persiste. ¿Habrá mercado en esta localidad, por atractiva y monumental que sea, para tantas empresas que son variaciones de lo mismo? Eso cabría preguntarse también en muchos otros sectores, claro. Es difícil nacer al mundo empresarial con una idea nueva y que funcione. Pero Antonio David Gil no lo duda: «El turismo en Sevilla cuenta con diversas posibilidades, pero muchas de ellas se centran en lugares y rutas que se vienen repitiendo durante décadas. A pesar de la amplia oferta actual, nosotros pensamos que Sevilla puede ofrecer algo más y por eso pusimos en marcha nuestra empresa, que ofrece la posibilidad de disfrutar de los aspectos menos conocidos de la ciudad a través de experiencias diferentes, que permitan a las personas vivir las singularidades de nuestra historia, nuestro arte y nuestra cultura. Somos un complemento de calidad a la oferta turística actual».
«Dice la Real Academia», ilustra Gil, «que experiencia es el hecho de haber sentido, conocido o presenciado alguien algo y eso es lo que pretendemos nosotros con nuestros servicios turísticos, que las personas sientan y participen en lo que viven con nosotros. Queremos que sus visitas a Sevilla sean inolvidables». A fuerza de competencia pura, resulta que lo insólito, lo extraordinario, lo diferente y lo nuevo van engrosando la oferta turística de esta ciudad que seguro que nunca pensó si es que las ciudades piensan que diera para tanto. Toda una experiencia también para ella.
