Diego de Siloé y la nueva fábrica de la Sacristía de la Catedral de Sevilla. Éste es el sugerente título del libro que hoy presenta el arquitecto Ricardo Sierra Delgado sobre uno de los primeros espacios renacentistas de la seo hispalense. Una visión diferente de esta joya del templo que, además, intenta ofrecer nuevas hipótesis de su historia. El salón del Almirante del Real Alcázar de Sevilla será el escenario de la presentación de esta obra, editada por el Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla en colaboración con la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía. Y sus páginas albergan sorpresas.
El profesor del Departamento de Expresión Gráfica Arquitectónica de la Universidad de Sevilla asegura que su libro es fruto de la lectura del edificio "con ojos de arquitecto". Pero hay más. Sierra trata de "clarificar" los orígenes de la Sacristía e incluso se atreve a asegurar que el inicio de su construcción se produjo entre 1534 y 1535. "Hay noticias documentales de finales de los años veinte del siglo XVI", apunta. De hecho, su arquitectura está "muy relacionada con la arquitectura que se creaba en aquella época en zonas como Granada".
No en vano, asegura que el proyecto de la Sacristía es de Diego de Siloé. "Cuando éste deja el proyecto de Sevilla se hacen cargo de él los operarios sevillanos, el maestro mayor de la Catedral", explica el escritor y arquitecto. Esto es, que cuando De Siloé abandona el proyecto porque ya tiene demasiado trabajo en Granada lo asume Diego de Riaño, a quien se le atribuye la autoría de la Sacristía y, tras su muerte, al que fue su aparejador, Martín de Gainza, otro cantero vizcaíno.
A imagen y semejanza. "Las analogías formales son contundentes", según Sierra. En concreto, con obras de Diego de Siloé: la Catedral de Granada y la capilla del Salvador de Úbeda, de 1536. Columnas, pedestales, el uso de cúpulas, las medidas, patrones numéricos basados en el pie...
Tras muchos años de trabajo, Sierra reconoce que los documentos sobre la construcción de la Sacristía (acabada en 1543) son "precarios" y poco "convincentes", de ahí que el libro no esté basado en archivos. "Yo no soy historiador", así que el libro es "una lectura arquitectónica de la obra", matiza.
Según el arquitecto, esta pieza de la Catedral rompió la tendencia de la época, que hasta ahora no tenía una visión urbana. "La fachada es una tentativa de remozamiento del exterior", apostilló tras apuntar que la Sacristía inicia una tendencia en Sevilla originaria de Italia, donde los edificios religiosos ya cuidaban su imagen exterior. A principios del siglo XVI, en Sevilla, en cambio, la tradición islámica y medieval aún pesaba mucho.