Lance del encuentro entre el Utrera y el Osuna correspondiente a la pasada temporada. / Bernardo Ruiz
Cuando quedan un par de semanas para que se inicie la Liga en Primera Andaluza, el Utrera ansía incorporar a un extremo y así finiquitar la plantilla para esta temporada. El técnico utrerano Miguel Ángel Montoya se mantiene a la espera de que algún equipo de Tercera División descarte futbolistas interesante para traérselos al San Juan Bosco. Aunque realmente ese no lo considera su el plan A para cubrir esa posición del campo.
La idea de Montoya es contar con un jugador de la casa, como es Raúl Domínguez. El atacante es natural de Utrera y tiene la cualidad principal que demanda el entrenador: una dilatada experiencia en Tercera. Domínguez, de 33 años, ha pasado por numerosos equipos de esa categoría, como el Mairena, el San Roque de Lepe o el Algeciras. Esa es la carta de presentación de Domínguez, aunque la incertidumbre sobre su incorporación reside en el aspecto físico. El extremo se lesionó en marzo en el campo del Osuna, sufriendo una fisura de ligamentos en la rodilla que lo ha tenido apartado de los terrenos de juego prácticamente hasta hace unos días. El futbolista ha empezado a realizar carrera continua y trabaja con los fisios del equipo para volver a ponerse a tono lo antes posible. Montoya tiene claro que su prioridad es contar con el veterano jugador, que tendrá la última palabra en este aspecto. En el caso de que no se fructifique el deseo del entrenador, el joven Reyes, procedente del filial, podría ser la alternativa.
