Con el debate sobre la nueva ubicación de la mezquita en pleno auge, un libro de dos profesores de Filología de la Universidad de Sevilla y de la Pablo de Olavide (UPO) destapa la cara más oculta del Islam. Disquisiciones sobre el velo islámico, no sólo trata de buscar el origen de esta prenda que se ha convertido en símbolo de la mujer islámica, sino que en él Juan Antonio Pacheco y Katjia Torres entran a analizar la estructura patriarcal de la sociedad, basada en una "versión desvirtuada" del Corán.
El libro fue presentado ayer en la sede de la UPO en un seminario en el que se cuestionó "la opción personal que esgrimen las musulmanas ortodoxas practicantes a vestir el velo", ya que, según explicó Torres, "es una consecuencia lógica del habitus corporal de género integrante de un complejísimo y diversificado proceso de socialización". De hecho, el profesor Pacheco mantuvo en su conferencia que, lejos de lo que se cree, el hiyab y el sometimiento de la mujer "no tiene su origen en lo religioso", sino en "aspectos económicos y sociales", pero "se quiere llevar el debate hacia lo religioso".
Pacheco dijo que ni el Corán ni el uso del velo "están asociados al retraso de la mujer, al menos en su origen". El profesor resaltó el importante papel que la mujer tenía en el Islam clásico, antes de Mahoma, en el que incluso llegaron a dirigir batallas. Además, explicó que el libro sagrado del Islam incluso dedica un capítulo completo a una mujer, "a María, la madre de Jesús". Sin embargo, con el imperio turco(1.300-1922), se "sometió a la mujer a una serie de costumbres de una sociedad arcaica, entre ellas el velo, y la en una sombra".
Pacheco destacó que el Corán hace hincapié en la igualdad del hombre y la mujer, aunque en otros preceptos se contradice. Precisamente, son en estos versos en los que se ha basado la sociedad patriarcal, "desvirtuándolo", como ocurre por ejemplo con el repudio. "El Corán es la base de los textos civiles y penales, y en él se dice que la mujer también puede repudiar al marido y se contemplan una serie de requisitos legales", añadió Torres, quien aclaró que se debe entregar una dote a la mujer, que no se hace en la práctica. Pacheco recordó a Qasim Amin, un jurista egipcio que defendió el papel de la mujer en una sociedad de progreso.
Pacheco terminó, insistiendo en que "en los años 80 el mundo árabe se vio asaltado por el fundamentalismo", que ha hecho que estemos "apabullados y seamos unos ignorantes, porque no todos los musulmanes rezan cinco veces al día". Por eso, instó "a leer el Corán como libro sociológico y a viajar, porque no es un mundo simplificado como nos ofrecen los medios".
