Los ajustes internos realizados en el Ayuntamiento durante los últimos años para compensar los problemas de liquidez han provocado numerosos desfases contables que empiezan a salir a la luz conforme las facturas se han puesto encima de la mesa y se han computado como pagos reconocidos pendientes en la cuenta municipal.
Las cifras en Emasesa rebasan ya los 4,5 millones de euros. A los tres millones de recibos de los dos pasos inferiores reclamados al área de Movilidad que fueron devueltos por el Consistorio ya con Juan Ignacio Zoido como alcalde, se añaden 1,5 millones en facturas correspondientes a la utilización del servicio radiofónico de la Policía a través de la red Secora. Y esto sin contar las facturas por consumo de aguas de varias delegaciones computadas también, a instancias del interventor municipal, en la cuenta 413 del Consistorio.
La red de transmisión digital Secora integró a varias áreas municipales, incluyendo empresas como Tussam y la radio interna de la Policía Local y el Cecop, a través de un servicio instalado por Emasesa. Durante los últimos años, según confirmaron fuentes policiales y de la empresa, la sociedad metropolitana había venido reclamando el pago a las delegaciones y empresas de una cantidad por esta prestación, cifra que no siempre se reconocía. Se hizo inicialmente a través de la Delegación de Innovación, y después se empezaron a reclamar al área de Convivencia y Seguridad. Pese a esto, principalmente por falta de recursos, este área no abonó ninguno de estos recibos.
Así, durante los últimos tres años, se han acumulado facturas por un importe de 1,5 millones correspondiente al uso de esta red por parte de la Policía Local que han salido a la luz precisamente ahora, con el cambio de ciclo. Pese a esto, no se trata de recibos ocultos en los cajones como ha denunciado en repetidas ocasiones el PP, sino de facturas que al cerrar las cuentas ante los comicios y el cambio de gobierno, se decidió dar parte a la Intervención e incluirlas en la cuenta municipal. Ahora, quedan como pagos pendientes internos que el nuevo gobierno deberá determinar si los condona Emasesa -lo que desajustaría las cuentas de la empresa de aguas- o se abonan con presupuesto de la Delegación de Convivencia y Seguridad, sin apenas fondos para el resto del año ni para mantener los servicios básicos.
La deuda de la red Secora afecta también a otras empresas y delegaciones municipales, que entraron a formar parte de este servicio pilotado teóricamente por la Agrupación de Interés Económica pero con un papel protagonista de Emasesa. En el sistema, que costó más de ocho millones de euros y que tomó impulso en este mandato, entraron los servicios de seguridad y protección civil y todas las empresas municipales. Aunque el objetivo del proyecto implantado por la empresa Telvent fue una mayor eficacia en el sistema de comunicaciones interno y un ahorro de costes, el servicio ha sido objeto de numerosas críticas durante los últimos años por las pérdidas de red del servicio de policía y en Tussam.