Unai Emery no varió sustancialmente su discurso respecto a otros días pese a vivir su noche más difícil en el Pizjuán. Fue cuestionado sobre la conversación que mantuvo nada más acabar el partido tanto con el presidente José María Del Nido como con Monchi, subdirector general deportivo, que bajaron a vestuarios. Hemos hablado como en todos los partidos para sacar conclusiones y ya después en frío darle respuesta a lo que hemos hecho hoy, dijo tratando de revestir de normalidad la circunstancia. Asumo que planteé el partido para tener capacidad de respuesta y control y no lo hemos hecho. Ni con el balón ni con la presión, ni con el contragolpe. El primer tiempo lo pasamos pero sin dar visos de poder ganar, hemos procurado controlar el centro del campo con la posesión después pero el gol ha sido una losa importante y el Celta ha hecho un buen partido, admitía el entrenador vasco, que continuó con su discurso descriptivo. Si el equipo no está bien tengo que buscar soluciones, más allá de que haya jugadores que no estén bien. Asumo que las cosas no han salido y la respuesta es enderezar con trabajo. Admitió que el equipo ha dado un paso atrás importante en esta derrota. Si de algo nos estábamos fortaleciendo es que en casa éramos más fuertes y no hemos tenido la respuesta ofensiva que pretendemos. Hemos estado cohibidos. No podemos pensar en ser buenos en defensa perdiendo en ataque. La diferencia entre ganar y perder hoy era importante y la clasificación dice que no estamos sacando rendimiento al equipo. Hay jugadores con margen de mejora y ese es nuestro trabajo. Otra cosa es que en ese proceso se necesite tiempo, pero no quiero que sea una jusficación. Descartó que vaya a renunciar y a cambiar el plan del equipo. Mi idea es levantarme y trabajar para llevar al equipo al lugar que se merece. Hay que ser constantes en la idea para plasmarla y con estos mimbres hay capacidad para llevarla a cabo. Faltó la agresividad defensiva que queremos, el equipo en casa sí había asumido estar por encima del rival, pero hoy no y es un parón que me preocupa. Sé donde me muevo y tengo que mantenerme firme en el trabajo. Sigo estando ilusionado con este proyecto, dijo Emery.