Rakitic,disputando un balón (Foto: Ramón Navarro)
Tal como ocurrió en la anterior eliminatoria, el Sevilla se jugará el ser o no ser en la Europa League en el partido de vuelta. Esta vez, el escenario será el Sánchez-Pizjuán. Allí, el equipo de Unai Emery tendrá que dar la vuelta al 1-0 que cosechó este jueves en el Estadio do Dragao. El gol de Mangala, a la media hora de juego, da ventaja provisional al Oporto, superior en este primer choque.
Los nervionenses sufrieron, y mucho, para frenarlo. Hasta dos veces vieron cómo su rival estrellaba la pelota en el palo, en medio de un mar de ocasiones hasta diez claras que puso en serio riesgo la eliminatoria. Además, el Sevilla volvió a pecar de inocente en un mal momento. El increíble error de Kevin Gameiro, enviando fuera la pelota con toda la portería para él a quince minutos para el final, simbolizó el quiero y no puedo. Tuvo cinco claras el equipo y, por segundo encuentro consecutivo (tras el de Vigo), fue incapaz de marcar .
Hasta ahora, el Sevilla había visto puerta en sus siete encuentros (tres de la fase de grupos, uno de dieciseisavos y uno en octavos) que ha disputado como visitante. En Oporto era obligado hacerlo. No lo consiguió. Al menos, el 1-0 es un mal menor, visto lo visto.
Por mucho que el Oporto ande descolgado de la lucha por el título de Liga en Portugal y no viva su mejor campaña, tiene calidad y orgullo. Lo demostró desde el primer instante. El conjunto de Luis Castro imprimió un ritmo vertiginoso al encuentro y se comió al Sevilla por momentos. Entre su extenuante presión, velocidad y acierto en los pases, el equipo de Emery quedó a merced de los dragones.
Sin Fazio ni Mbia, sancionados, el técnico tiró de Carriço para situarle junto a Iborra en el doble pivote, con Rakitic por delante y Reyes y Marko Marin en las bandas. Sin embargo, el Sevilla fue un quiero y no puedo. La pelota le duró un suspiro en su poder, los dos extremos se mostraron inocuos en defensa y en ataque... Y el gol del Oporto se veía venir. Tampoco brilló el croata, cerebro del equipo. Cuando él estornuda, el Sevilla se resfría. Puso ganas, pelea... pero no fue su día. La imprecisión también se apoderó de él y, para colmo, los cambios no aportaron nada.
El 1-0 llegó a la media hora de partido. Lo propició un clamoroso despiste defensivo en una falta que el Oporto puso en juego con rapidez hacia la banda izquierda, desde donde Quaresma la sirvió a Mangala para que éste, a placer, cabeceara. Espectacular el otrora extremo del Barcelona, Inter, Chelsea... Fue una auténtica pesadilla. Incluso estrelló un balón en el palo que pudo ser casi definitivo (minuto 91). Como Defour, que lo había hecho justo antes del descanso. Otro buen jugador que, junto a Fernando, se adueñó del centro del campo. Y qué decir de Mangala, central internacional francés llamado a ser grande de verdad. Todo un espectáculo.
HAY VIDA. Emery sufría viendo el panorama. Intentó dar otro aire al equipo con un doble cambio. Retiró del campo a Iborra y Marko Marin y dio entrada a Diogo y Kevin Gameiro. Poco después saldría Vitolo por Reyes cuando éste resoplaba intentando echar una mano en defensa. El Sevilla mejoró algo en la segunda parte, pero él solito se complicó al vida. Sus pérdidas a la hora de sacar la pelota de su campo lo pudieron en jaque una y otra vez.
Lejos de perder fuelle, el Oporto -con diez hombres desde el minuto 87 por expulsión de Fernando- siguió imprimiendo al juego un ritmo de Champions, la competición que comenzó disputando antes de recalar en la Europa League. Por suerte para el Sevilla, entre Beto, los palos y la negativa a perder la eliminatoria en este partido de ida, el Sánchez-Pizjuán dictará sentencia. Esta vez no valdrá perdonar. Si quiere seguir adelante, tendrá que ofrecer su mejor cara y dar un nivel de Champions.
Ficha técnica: 1 - Oporto: Fabiano; Danilo, Mangala, Diego Reyes y Alex Sandro; Fernando Reges, Steven Defour (Héctor Herrera, min.70) y Carlos Eduardo (Juan Quintero, min.57); Silvestre Varela (Ghilas, min.76), Jackson Martínez y Ricardo Quaresma.
0 - Sevilla FC: Beto; Coke, Nico Pareja, Fernando Navarro, Alberto Moreno; Iborra (Diogo Figueiras, min.63) Carriço; Reyes (Vitolo, min.74), Rakitic, Marko Marin (Kevin Gameiro, min.63); y Bacca.
Gol: 1-0: Mangala, min.30.
Árbitro: Wolfgang Stark (ALE). Amonestó a Alberto Moreno y José Antonio Reyes por el Sevilla; y Jackson Martínez y Mangala por el Oporto. Fernando (Oporto) fue expulsado por doble amarilla (87).
Incidencias: Ida de los cuartos de final de la Liga Europa disputada en el Estadio do Dragao de Oporto ante unos 31.000 espectadores (unos 1.600 de ellos, sevillistas).
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