De arriba a abajo: El juez Víctor Pardo y su hija Lucía charlan con Elizabeth Ortega / El periodista AntonioDelgado-Roig informa sobre la salida del Baratillo. / Eugenia Jiménez entrevista a Francisco Berjano.
No cabía nadie en la calle Adriano. Bueno sí, las miles de personas que a través de la retransmisión de El Correo TV pudieron disfrutar de uno de los días más intensos de la Semana Santa de Sevilla. Era poco más de la una de la tarde cuando arrancó una jornada que concluyó en la madrugada del Jueves Santo. Salía el Baratillo desde su capilla y lo contábamos en directo. Entraba la Caridad bajo palio en el Arenal y allí estaban nuestras cámaras para llevarlo al mundo. No importaba el reloj, un día más. Ayer con la chicotá más larga de toda la semana.
Los miles de espectadores lo agradecían a través de las redes sociales. «Qué recuerdos me traen estas imágenes de cuando me acariciaba el albero maestrante mi cíngulo blanco», decía manuroldan10 por medio del hastag #ssantaelcorreo, habilitado para canalizar los sentimientos de toda la Semana Santa. Joan, desde el Levante, lo corroboraba. «Mis abuelos sevillanos viendo a su Baratillo desde Valencia. Toda la familia reunida gracias a @elcorreoweb». Qué emoción.
Eso ocurría a última hora, pero la emoción fue una constante toda la jornada. Al mediodía sonaba el teléfono en la redacción. En El Correo TV la salida del Cristo de la Salud, al otro lado del teléfono una señora de Tenerife. Lloraba. Sus hijos eran nazarenos de San Bernardo y ella los veía gracias al esfuerzo de este equipo. Si los sentimientos han sostenido a las cofradías durante siglos, ¿que son 14 horas de emisión? Un suspiro al lado de emociones como éstas.
