El bailaor Juan Manuel Fernández Montoya "Farruquito" asegura que con su espectáculo "Puro", que mañana pondrá en escena en el Auditorio Rocío Jurado de Sevilla, dentro de la XV Bienal de Flamenco de Sevilla, mostrará su forma de ser, sus sentimientos.
"Bailo solo y la música y la letra (de "Puro") es lo que me gusta escuchar cuando bailo; es un espectáculo sobre mi persona", ha asegurado el bailaor, quien ha afirmado que él ha elegido la música y los instrumentos -un violín y un piano, además de las guitarras- y él ha escrito las letras, ya que, en conferencia de prensa, contó que escribe desde siempre, desde que estaba en el colegio.
El título del espectáculo no alude, según el artista, a la pureza de su arte, sino a que en esta ocasión ha trabajado él sólo, sin su familia, como le era habitual, para mostrarse tal cual es, y que "cualquier cosa auténtica merece ese título".
Por eso ha advertido que, aunque lo que haga siempre sea bailar flamenco, este montaje es "totalmente diferente" a los que ha hecho con anterioridad.
Del espectáculo, que se divide en siete partes y que con casi noventa minutos de duración transcurrirá sin descansos, ha comentado que la parte que prefiere es la titulada "Herencia", una soleá, porque es un homenaje a su abuelo, "Farruco": "Con la soleá me acuerdo de él más que con ningún otro baile; y si tengo algún reflejo suyo me gusta que se vea ahí, en la soleá".
Además, ha añadido, "bailar soleás en estos tiempos que corren es muy difícil".
Preguntado sobre la seguiriya titulada "Sentencia", que será la que baile en tercer lugar y si el título aludía a su paso por los tribunales y por prisión como autor de un atropello mortal, el artista ha declarado que el sentido de "sentencia" se debe aquí a la transmisión del arte por parte del viejo al joven, y lo ha explicado con la letra de esta seguiriya: "Campanillas de bronce / que a sentencia suenan".
Esa letra remite, según el artista, a esa transmisión entre el viejo y el joven "cuando se pasa por la fragua, a la toná, que es el primer cante" y como ese cante primigenio y esa enseñanza evoluciona hasta que surgen otros palos flamencos.
"Farruquito" ha confesado que le gusta bailarle al cante y alimentarse de él y que algunas veces no sabe si le gusta más "el cante o el baile".
La productora de "Puro" lo es también de un documental con el mismo título sobre el bailaor, sobre su trabajo diario y sobre los preparativos de montaje de un espectáculo de estas características, un rodaje para el que se ha trabajado durante cinco meses, de lunes a viernes y en el que han intervenido unas ochenta personas.
"Así me tienen, que peso cincuenta kilos", ha bromeado sobre este trabajo el artista, quien ha destacado que esta película, parte de la cual se proyectará en una pantalla de dieciséis metros de larga durante el espectáculo de mañana, trata de mostrar "cómo son las entrañas de un proyecto" como éste.
También ha bromeado el bailaor con el vestuario, él ira de Vittorio y Lucchino, y su gente, como él se refiere a sus músicos, de Hugo Boss, tan elegantes que, ha señalado, alguien ha dicho que "si no se desmelenaran y cantaran con esa fuerza parecerían ministros".
El bailaor ha destacado que su actuación de mañana se la dedicará, "con el permiso del maestro José Ortega Cano", a Rocío Jurado, cantante fallecida que da nombre al auditorio al aire libre que se levantó en la isla de la Cartuja con motivo de la Expo 92.
En "Puro" actuarán cuatro cantaores y tres cantaoras, al toque tres guitarristas, además de violín, percusión y piano y, como artista invitado, Manuel Molina, autor de la letra de "Sentencia", la única que no ha escrito el bailaor, quien se ha encargado también de la dirección y la coreografía, y que baila solo en "Puro".
