Primero fue Eindhoven, luego Glasgow y hoy puede ser Turín la ciudad que se incorpore al club de los sueños del sevillismo, que se ha movilizado en masa como merece la ocasión. Este sábado se cumplirán siete años de aquel partido de vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA que acogió el Ramón Sánchez-Pizjuán ante Osasuna, el partido en el que el Sevilla de Juande Ramos abrió la puerta de su segundo título en la capital escocesa. Hoy está otra vez en el penúltimo escalón, en Mestalla, peso si cabe, en mejor posición, porque aunque jugará como visitante en el estadio del Valencia, afronta el encuentro con una gran ventaja, el 2-0 que lograba en Nervión la semana pasada gracias a los goles de MBia y Carlos Bacca. Ante los pamplonicas debió remontar el gol de Roberto Soldado de El Sadar, como el 6 de abril de 2006 tuvo también la necesidad de ganarle el encuentro al Schalke 04 después del empate a cero en Gelsenkirchen. Y llegó en el minuto 101 el zurdazo de Antonio Puerta que cambió la vida de la institución sevillista, tan ligada desde entonces a este torneo continental.
Es un día para jugar con inteligencia, un partido en el que aprovechar la presumible ansiedad del Valencia, un equipo, en cualquier caso, que ya demostró en la ida que está capacitado para poner en problemas al conjunto de Unai Emery, por mucho que también se constara que el Sevilla es mejor, con más talento y recursos. Pero en el fútbol, ya se sabe, ningún equipo se impone si no hace las cosas lo suficientemente bien, más a las puertas de una final europea.
El Valencia también es un club con genética ganadora en esta competición. Fue campeón en 2004 en Goteborg, un año en el que también ganó la Liga y fue declarado mejor equipo del mundo ese año, como también lo sería el Sevilla al hilo de sus éxitos en 2006 y 2007. También tiene en su palmarés los entorchados del 62 y 63 cuando tenía el nombre de Copa de Ferias, también ganó la Recopa de 1980 y en 2000 y 2001 disputó, y perdió, dos finales de la Liga de Campeones. En total cuenta con siete títulos europeos. Hoy peleará por una remontada que su historia le lleva a pensar que es posible y que tiene casos ciertos en su recorrido, como aquel registrado ante el Hibernian escocés en la Copa de Ferias de la 65-66, del que, lógicamente, ni en la capital del Turia se acuerdan, y donde tratan de agarrarse al espíritu del vuelco que le dieron a la eliminatoria de cuartos ante el Basilea, al que ganó por 5-0 tras el 3-0 de la ida. El Sevilla, en cambio, en las siete ocasiones en la que ha dispuesto de un 2-0 en la ida, siempre ha superado el trance. Llega fuerte y confiado, en el mejor momento de la temporada pese al borrón del domingo pasado en San Mamés, donde no peleó con todas sus fuerzas por esa plaza que se jugaba en la Champions con el Athletic precisamente porque su prioridad era el día de hoy, este partido que debe colocarle en la pelea por su séptimo título.
Y si para el Sevilla sería volver a una final, para Unai Emery sería alcanzar la primera, después de estar en la temporada 2011-2012 en las semifinales de esta competición precisamente con el Valencia, donde fue apeado por el Atlético de Madrid, que luego fue campeón. Hoy puede apear al que fue su equipo de nuevo en la penúltima ronda y colocarse a un paso de la matrícula de honor en su segunda temporada en Nervión. Tiene a su disposición a todos los jugadores para plantar, presumiblemente, su once de gala ante el conjunto de Juan Antonio Pizzi, que sí hará cambios porque también recupera jugadores. Todo hace indicar que el vasco podrá contar tanto con Daniel Carriço como con MBia, que el martes no entrenaron con el grupo, como tampoco Coke ni Alberto Moreno. El portugués, un jugador clave en la medular, se resintió en Bilbao de sus problemas en el tobillo derecho pero parece en disposición de ser de la partida. Cabe la posibilidad también de que Emery decida reservar a Carlos Bacca y colocar como titular a Kevin Gameiro en la posición de nueve, dado que el colombiano está apercibido de sanción y si viera una amarilla se perdería la final. El 2-0 le da margen al técnico, y además el francés está también en un buen momento.
Por lo que respecta al Valencia, hasta esta mañana no conocerá si tiene éxito el recurso de apelación que ha presentado a la UEFA contra la resolución previa que impide a su goleador Paco Alcácer disputar hoy el partido, por la tarjeta amarilla que vio en el partido de ida en un lance con Beto en el que el árbitro interpretó erróneamente que golpeaba al meta sevillista. Si no pudiera jugar sería una baja importantísima, dado que Alcácer ha anotado 7 goles en la competición, a uno del pichichi. Ante el Basilea hizo tres.
En su lugar Pizzi colocaría a Jonas, y dará los guantes de la portería a Diego Alves, que entrará por Guaita, desafortunado en los últimos partidos del Valencia. Igualmente, recupera para el eje central de la zaga a Ricardo Costa y Javi Fuego, que jugó en su lugar en Nervión, volvería al centro del campo junto a Keita y Parejo.
Alineaciones probables: Valencia CF: Alves, Joao Pereira, Ricardo Costa, Mathieu, Bernat; Keita, Parejo, Javi Fuego, Feghouli; Fede y Jonas.
Sevilla FC: Beto; Coke, Nico Pareja, Fazio, Fernando Navarro; M'Bia, Carriço; Reyes, Rakitic, Vitolo; y Bacca.
Árbitro: Milorad Mazic (Serbia).
Estadio: Mestalla.
Hora: 21.05
TV: Cuatro
