J.J.M.
Con sacos de dormir, bocadillos, café y algunos periódicos, las asociaciones de San Juan de Aznalfarache iniciaron ayer un encierro de 24 horas en el consistorio para exigir un presupuesto cerrado para la reforma del centro de salud Nuestra Señora de la Paz.
En el salón de plenos se congregaron más de una veintena de personas, pertenecientes a 20 colectivos diferentes, además de representantes de los distintos partidos. Son asociaciones que aglutinan a unas 200 personas. "Estamos haciendo turnos porque hay mucha gente que está trabajando y vendrán más tarde", comentaba una vecina.
Pese a que la Consejería de Salud inició recientemente las obras en el consultorio, sólo está ejecutando una parte del compromiso que, según las asociaciones, había adquirido con ellas. Si para su completa remodelación se habían presupuestado más de 400.000 euros, las obras que ahora mismo se están llevando a cabo en la planta baja tienen un coste de algo más de 100.000, y "no existe documento alguno" que garantice el resto de la inversión necesaria, según alegan desde el municipio.
El vicepresidente del Consejo Local de Participación Ciudadana, Juan Luis Alcedo, manifestó que la Delegación Provincial de Salud les transmitió en una reunión reciente que no se quieren comprometer con "un dinero que no está liberado". En su opinión, la única garantía posible y el fin de las movilizaciones sería que la partida restante, 317.000 euros, se incluya en los presupuestos de 2009 de la Junta de Andalucía. La respuesta la tendrán posiblemente la próxima semana cuando se definan los proyectos a ejecutar por la consejería.
El vicepresidente sostuvo que de no lograr sus peticiones barajan la posibilidad de endurecer las manifestaciones con cortes de tráfico. "Por este pueblo pasan dos autovías, la de Coria del Río y la de Mairena del Aljarafe", avisó el portavoz de los vecinos.
En su día estos colectivos denunciaron que el centro de salud, que atiende a unos 20.000 habitantes, utiliza una misma sala para los ejercicios de preparto y para los análisis clínicos, las consultas de los médicos se reducen a "unos escasos cuatro metros cuadrados" y no hay una sala de reuniones para los médicos.
