La Policía Nacional localizó el miércoles a la última niña que se fugó de un centro de menores de la localidad cordobesa de Hornachuelos. La consejera de Gobernación, Clara Aguilera, confirmó que la chica, de entre 14 y 15 años, que se escapó junto a otras cuatro compañeras "está perfectamente situada en Granada". Aguilera pidió "respeto" hacia la menor que "debe concretar algunas cuestiones personales", ya que el miércoles la chica tenía previsto "visitar a su madre, que está en la cárcel de Granada".
Bajo la tutela de la Policía Autonómica, la menor volverá al centro para "seguir con su educación", anunció Aguilera, quien recordó que, en este caso, se trata de una chica con "un entorno complicado". Respecto a las cinco denuncias de malos tratos que pesaban sobre algunos de los educadores del centro, motivo esgrimido por las menores para su fuga, Aguilera explicó que se han retirado cuatro de las cinco presentadas, aunque evitó pronunciarse sobre lo que ocurrirá con la última menor.
La niña ha nombrado un representante legal y pide ser acogida por su familia en Granada. El portavoz de la Asociación Pro Derechos del Niño (Prodeni), José Luis Calvo, explicó a Europa Press que la chica fugada, la cual puede encontrarse en el barrio granadino de Almanjáyar, según informaron efectivos de la Unidad de la Policía Nacional adscritos a la Junta, ha nombrado como su representante legal al presidente de este colectivo, Juan Pedro Oliver.
Imputada una mujer . La mujer que acompañó al cuartel de la Guardia Civil de Palma del Río a las cinco niñas fugadas para interponer una denuncia por supuestos malos tratos contra los educadores del centro ha sido imputada por, supuestamente, "inducir a las menores a autolesionarse". Según confirmó a Europa Press la propia imputada, el martes declaró ante la Policía Judicial por estos cargos y ayer hizo propio en el juzgado de Posadas, donde también prestarán declaración los educadores de la residencia.
La mujer está "indignada" y no entiende que ahora sea ella la única imputada, cuando "en todo momento" actuó "guiada por el corazón y con buena fe". Reconoció ser la madre de otra menor de 13 años y que estaba embarazada cuando también se fugó del centro en mayo alegando haber sido maltratada.
