Cojan fuerzas, tomen impulso y prepárense para subir no una cuesta -la tradicional del primer mes del año-, sino para escalar una empinada pared, la que nos ofrece este 2013 que recién estrenamos con las habituales indigestiones de subidas generalizadas de precios. Poco escapa a esta tendencia. Se encarece la factura de la luz, el billete de los trenes y autobuses, las tasas municipales y los precios de los servicios públicos. Y ello, sumado a los esfuerzos ya afrontados en un 2012 cargado de novedades fiscales y subidas de impuestos como el IRPF y el IVA.
No ha esperado ni siquiera a la entrada del año nuevo el tabaco, que ha subido los precios desde el pasado sábado. Altadis, propietaria de marcas como Nobel, Fortuna o Ducados, ha encarecido 20 céntimos la cajetilla, después de que el Ministerio de Hacienda haya incrementado el impuesto especial que grava el consumo de cigarrillos.
A falta de conocer el cierre del último mes del año, los precios se incrementaron un 2,9% en noviembre, según el último dato del IPC, mientras los salarios se mantienen estancados o mermados y con la atención centrada en si 2013 trae consigo nuevas subidas de impuestos . Ante este panorama, veamos cómo se resentirá el bolsillo desde el día 1 y qué será lo que aportará un ligero respiro a la cartera. Es poco, pero lo hay.
Electricidad
El recibo de la luz vuelve a encarecerse. Lo hará una media del 3% para el consumidor doméstico, aquel que se acoge a la Tarifa de Último Recurso (TUR) -22 millones de hogares en España-, con un incremento medio que rondará los 2,5 euros al mes. En comparación con lo que se pagaba hace justo un año, los hogares abonarán un 8,3% más, según los cálculos realizados por la asociación de consumidores Facua, lo que se traduce para una familia con un consumo mensual de 366 Kilovatios (kWh) y una potencia contratada de 4,4 kW en pagar 6,48 euros extra al mes y 77,76 euros más al año.
El que año que entra, además, vendrá con otra novedad en la factura, que a partir de abril volverá a ser bimestral, es decir, se pagará en función de la lectura real del contador y no cada mes -alternando lectural real y estimada-, lo que ha provocado numerosas quejas entre los consumidores. Pero ojo, que Industria penalizará con dureza el consumo excesivo de electricidad -establecido en un 10% más que la media, aunque el castigo será progresivo-, de manera que la factura puede incrementarse entre un 3% y un 7% adicional.
Gas natural y butano
Frente a la subida de la luz, el gas natural y la bombona de gas butano mantendrán congelados sus precios en el comienzo del año -cabe recordar que las revisiones de precios son trimestrales-, según ha anunciado el Ministerio de Industria, con lo que da una pequeña tregua al bolsillo. Aun así, lo que pagaremos en enero será bastante más de lo que lo hacíamos ese mismo mes de 2012, puesto que a lo largo de ese ejercicio los precios del gas natural se incrementaron un 0,5% en el primer trimestre, un 5% en el segundo y un 2,26% entre julio y septiembre. En el último trimestre, por contra, no registraron incremento.
Y un último apunte. Está por ver cómo repercute en la factura la aplicación de la nueva fiscalidad a las empresas energéticas que entra en vigor en enero.
Agua
Subirá por debajo del IPC, pero también sube. Lo hará un 1,9%, lo que supone unos 30 céntimos más al mes de media para el 65% de las viviendas y unos 80 céntimos para el 35% restante.
Teléfono
Novedad en el capítulo de la telefonía. La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha dado vía libre a Telefónica para que aumente la cuota de abono -lo que se conoce como el alquiler de la línea- hasta el máximo del IPC entre los años 2013 y 2016, incluido. Esta cuota, que actualmente se sitúa en 13,974 euros mensuales, ha permanecido congelada durante los últimos cinco años.
Vivienda
Malas noticias -y por duplicado- para quienes decidan comprar una vivienda. Desde enero no sólo se extingue la deducción fiscal por adquisición en el IRPF (15% sobre un máximo de 9.040 euros anuales), sino que además se incrementa el IVA a pagar en la compra, que se eleva del 4% al 10%.
Autobús y tren
Viajar en los autobuses urbanos de Tussam tendrá un sobrecoste para el bolsillo. El billete univiaje pasa a costar 1,40 euros (con un encarecimiento del 7,7%), mientras que los títulos de los bonobuses con y sin transbordo experimentan unas subidas del 5,56% y el 4,55%, respectivamente. Por su parte, la tarjeta de 30 días costará 35,30 euros, el 5,06% más, aunque estará bonificada para las familias numerosas. En la actualización de los precios, el Ayuntamiento ha sumado a la subida los dos puntos porcentuales de IVA que no aplicó en septiembre, cuando entró en vigor la revisión de los tipos de este impuesto. No obstante, las tarjetas para mayores de 65 años seguirán siendo gratis para todos, independientemente del nivel de renta con el que cuenten.
Las tarifas de los autobuses del Consorcio Metropolitano de Transportes experimentarán desde el día 1 una subida media del 3,4%, revisión que contempla el redondeo del billete sencillo, de modo que éste pasará a costar 1,35 euros sin salto y 0,92 si se usa la tarjeta del Consorcio. O 1,50 euros y 0,96 euros con un salto, respectivamente. Es decir, los billetes sencillos se encarecen entre cinco y diez céntimos y los viajes con la tarjeta, entre tres y nueve céntimos, según los saltos (de 0 a 5).
Por su parte, el servicio ferroviario de Cercanías y Media Distancia (regionales) de Renfe -que son considerados servicios públicos- actualizará sus precios con una subida media del 3%. Para contrarrestar el impacto, Renfe ha anunciado que aumentará del 10% al 20% el descuento en billetes de ida y vuelta en Media Distancia. La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha avanzado -sin concretar más- que las tarifas de los trenes AVE se reducirán para ofrecer precios más asequibles y cubrir así todas las plazas disponibles. Habrá que esperar a enero para conocer cuál es el alcance de esa rebaja.
Gasolinas y peaje
El encarecimiento de los carburantes ha sido una constante durante 2012. En 2013 habrá motivos para que siga encareciéndose aún más. Para empezar, y al margen del vaivén que sufra la cotización internacional del barril de petróleo Brent -de referencia en Europa-, con el nuevo año desaparecerán las exenciones a los biocarburantes, que hasta ahora tenían un tipo impositivo cero en el impuesto especial de hidrocarburos. Desde el día 1, la ley de Presupuestos Generales del Estado recoge que este impuesto debe ser el mismo que para el resto de carburantes de automoción. En Sevilla capital, el litro de gasolina 95 se paga hoy a una media de 1,41 euros, mientras que en enero de 2012 costaba 1,36, es decir, está un 3,67% más caro. En el caso del gasóleo, el incremento es del 2,98%, al pagarse el litro a 1,38 euros frente a los 1,34 de hace un año. El efecto automático en el surtidor por el fin de esta exención se puede traducir en una subida del 0,3%. Pequeña, pero subida a fin de cuentas. Desde 2009, según la patronal del sector, los carburantes acumulan un 34% más de impuestos (18 céntimos por litro, de media).
Y si en el transporte por carretera se opta por una vía de peaje como la que une Sevilla y Cádiz, sepan que su precio sube un 2,4%. Un incremento que se suma al 7% que aplicaron las concesionarias en pleno verano tras perder las bonificaciones recibidas del Estado y al alza del IVA.
Tasas municipales
La subida generalizada de las tasas municipales y los precios públicos que aplicará el Ayuntamiento es del 3%. Pero se trata de una media, muy superior en algunos casos, como la zona azul, donde se pagarán 5 céntimos más en varios tramos de rotación. Es el caso del 9% que sube los 30 minutos en zonas de alta rotación (de 0,55 a 60 céntimos), o en una hora en áreas de baja rotación, que pasa de 0,60 a 0,65 euros (un 8,33% más).
Y, aunque los impuestos se mantienen congelados, ser un contribuyente puntual ya no tendrá premio. El Consistorio pretende ahorrar 1,2 millones de euros eliminando la bonificacion -que oscila entre el 1% y el 5%- por tener domiciliados los recibos del IBI, del IAE (Impuesto de Actividades Económicas) y el sello del coche.
Cambios fiscales
Entre los cambios más reseñables en el capítulo fiscal, hay uno que tener especialmente en cuenta. Y es que las ganancias patrimoniales obtenidas por la venta de un inmueble o de acciones en bolsa o de cualquier otro activo en un periodo inferior a un año tributarán a partir de ahora al tipo marginal de IRPF que le corresponda a cada uno por su nivel de ingresos. Hasta ahora, el tipo al que se tributaba oscilaba entre el 21%, 25% y 27%, en función de la rentabilidad obtenida.