"Entendí que era un homenaje a una persona tan ligada al franquismo que podía entenderse como una exaltación a una persona símbolo del franquismo". Con estas palabras se defendió ayer la edil de IU y exdelegada de Participación Ciudadana Josefa Medrano, para quien la Fiscalía reclama siete años de inhabilitación por prohibir un homenaje al escritor falangista Agustín de Foxá. En la puerta de los juzgados un nutrido grupo de compañeros de IU y CC.OO estuvieron apoyando a la concejal.
Medrano, que se declaró inocente y que sólo contestó a las preguntas de la Fiscalía y de su defensa, explicó que si revocó la autorización de la directora del centro cívico El Tejar del Mellizo fue por "seguridad". Y es que dijo que tras conocerse que se iba a celebrar el homenaje comenzaron a recibir correos y llamadas "amenazantes" e incluso hubo una manifestación en contra de que se celebrara un acto homenaje "a un diplomático franquista en un centro pagado con dinero público". La edil señaló que en la solicitud la entidad organizadora no especificó que era un homenaje literario y que ante "estas circunstancias excepcionales" decidió revocar la orden, siempre "pensando que era lo más prudente" y que era "legal porque estaba amparada por la Ley de Memoria Histórica".
La Policía en cambio declaró en el juicio que fue una decisión "aleatoria y arbitraria". De hecho, la Fiscalía mantuvo su petición de siete años de inhabilitación ante lo que considera una "ilegalidad grosera", pues "no realizó ninguna comprobación". La Asociación Ademán reclamó además, 20 meses de cárcel y 27.000 euros de multa; mientras que la Asociación Cultural Fernando III eleva la petición a 24 meses de prisión y 36.000 euros de multa.
