En pleno caso antiguo de Sevilla, en la calle Relator, se encuentra una casa de cuatro plantas donde se profesa una dedicación especial al mundo de la gastronomía. Una apuesta personal que pretende convertirse en punto de referencia en el mundo de la enogastronomía de todo el suroeste ibérico.
Es el sueño de su creador, José López Alba, Pepón para los que le conocemos hace años en este universo del vino y la gastronomía, donde tiene amplía experiencia y un profundo conocimiento de métodos, nuevas tecnologías, productos y relación con los más altos profesionales de la cocina.La casa de la calle Relator es trabajo y vivienda, en sus cuatro plantas, una de ellas morada de nuestro protagonista, se articulan diversos espacios para actividades enogastronómicas al más alto nivel, perfectamente organizados con una red domótica que controla sus espacios técnicos. Así se consigue una armonización entre una casa tradicional sevillana y unos espacios de trabajo equipados con las más novedosas infraestructuras tecnológicas.
En la planta baja se encuentra el Aula de Cocina, configurada como un espacio de clara visualidad y equipada con materiales de primera línea para elaboraciones al más alto nivel, el aula se abre a un espacio diáfano que puede acoger hasta una veintena de personas cómodamente sentadas. El Aula de Gastronomía está equipada con cámaras cenitales y equipo de audio, que permite la grabación de las clases y su retransmisión por circuito cerrado de televisión.
En la segunda planta se encuentran las dependencias administrativas y un espacio para el disfrute relajado con cómodos sofás, barra de bar y pantalla multimedia.
Un ascensor panorámico nos conduce al sótano, donde se encuentra el Taller de Cata, un espacio donde el vino es el gran protagonista. Hay una zona de lavado de copas y otra para su almacenaje y el de decantadores. Una zona para 12/14 personas para la cata de productos enogastronómicos y una bodega que alberga nichos de piedra de Borgoña con más de 2.000 botellas de vinos y destilados.
Coronando el edificio, en sentido literal y figurado, se encuentra su atractiva azotea, lugar para la formación y el ocio, los dos pilares del concepto Sevigastrum. En ella se encuentran una barbacoa con tolva para madera o carbón, plancha de lava y horno tradicional con suela de piedra.
Profesionales del sector tienen en Sevigastrum un punto de encuentro para sesiones demostrativas, clases y cursos, catas y presentaciones de productos, demostración de nuevos instrumentos y herramientas.
Como muestra de la importante actividad cultural gastronómica está, por ejemplo, el reciente curso monográfico realizado por Joan Roca del Celler de Can Roca (3 estrellas Michelín y 2º restaurante del mundo). Importante son los cursos realizados con niños, participativos y divertidos. Planificados para su próxima celebración un curso sobre cerveza, coincidiendo con la Oktober Fest de Munich, un curso sobre arroces levantinos en Octubre y otro de cocina de Wok. También en proyecto están la realización de viajes gastronómicos temáticos.
Entre los colaboradores de Sevigastrum se encuentran renombrados chefs como Julio Fernández del sevillano Abantal (1 estrella Michelín), Fidel Pernía de Masa Bambini o la experta en cocina japonesa Yuki Yonemura.
www.sevigastrum.com
