La Selección española venció a Serbia por 73-89 en un partido intrascendente para ambos pero en el que los jugadores se emplearon con dureza, sobre todo en la primera parte. A los de Orenga les valió un primer cuarto sensacional (34 puntos) para pasar invictos a octavos, donde les espera Senegal.
España y Serbia salieron desbocadas desde el inicio, presos de un ímpetu anotador desenfrenado. Además, lejos de ser un amistoso, los dos equipos se emplearon con dureza, lo que no significó buenas defensas, como lo demuestran los guarismos, con Pau Gasol y Juan Carlos Navarro inspirados. Poco a poco España se relajó y Serbia tiró de orgullo.
El pase por vestuarios enfrió un poco a ambos equipos, aunque el español comenzó a tomar temperatura de inmediato con un 2-8 (min.23) gracias a los robos de Ricky y las finalizaciones de Marc Gasol: 37-62. Comenzaron a hacer aparición las defensas y el porcentaje de aciertos bajó considerablemente. Los balcánicos cerraron el tercer periodo con victoria parcial de 21-17, para un global de 56-71.
Serbia mantuvo su hipermotivación hasta el final para conseguir un buen resultado ante España que le sirviera de punto de apoyo moral para los cruces de octavos. La ventaja quedó reducida a diez puntos (64-74) a falta de seis minutos. España había levantado el pie del acelerador, pero bastó apenas nada para restablecer un margen más amplio y cerrar una victoria que permite a España pasar invicta a octavos. El sábado espera Senegal.
