La selección española, tras forzar la prórroga en el último segundo, doblegó a Francia, vigente campeona de Europa, y se plantó en las semifinales del Mundial de la República Checa, en las que se enfrentará a Estados Unidos.
Amaya Valdemoro, muy activa desde el comienzo del encuentro, con siete puntos en los cinco primeros minutos del duelo, prendía la mecha de un partido que daría al ganador la posibilidad de pelear por las medallas.
Las francesas, bien plantadas en defensa y con las ideas muy claras en ataque, impidió que España consiguiera hacerse con las riendas en los dos primeros cuartos.
La corta anotación de ambas selecciones al término de los primeros veinte minutos (26-22) reflejó la tremenda tensión del enfrentamiento.
Tras el descanso, el conjunto español necesitaba mayor aportación de Lyttle en un momento en el que las galas conseguieron ponerse once arriba (35-24), máxima ventaja hasta ese momento.
España no se amilanó ante la posibilidad de disputar, por primera vez en su historia, las semifinales en un campeonato del mundo, pero no conseguía imponer su ritmo y el tiempo corría en su contra.
Francia, campeona del Europeo 2009, jugaba mucho más cómoda y no parecía dispuesta a ceder.
Dos triples de Valdemoro cerraron el tercer parcial y dejaron en nueve puntos la diferencia en el luminoso a favor de las francesas a falta de los diez últimos minutos (52-43).
Las españolas, muy agresivas en defensa, siguieron tirando de corazón y un triple de Montañana volvió a acercarlas en le marcador, mientras que el equipo dirigido por Pierre Vincent daba síntomas de debilidad.
Otro triple de Amaya Valdemoro, la estrella del partido, puso a tres puntos a España (64-61). La ex jugadora de la WNBA encestó luego dos tiros libres, las francesas sólo anotaron uno tras una falta señalada a las españolas y, a falta de un segundo, con 65-63 a favor de las galas, Valedemoro encestó una bandeja y forzó la prórroga (65-65).
La remontada impulsó a las españolas en el tiempo extra y acabaron por llevarse la victoria, pese a que Francia tuvo la posibilidad de empatar en la última jugada con un lanzamiento triple que no entró.
