El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer que el comando de ETA que ocupaba la vivienda de la localidad portuguesa de Obidos tenía preparados 300 kilos de explosivos para realizar un atentado "inminente", entre cuyos objetivos figuraba el cuartel de la Guardia Civil de Zahara de los Atunes (Cádiz).
Así lo aseguró el ministro en declaraciones a los periodistas antes de iniciar su viaje a Dakar, donde hoy asistirá a la conferencia sobre Lucha contra el tráfico ilegal de estupefacientes, en relación a las investigaciones sobre los explosivos incautados por las fuerzas de seguridad portuguesas el pasado día 5 en la localidad lusa de Obidos. Rubalcaba aseguró que los 300 kilos estaban preparados para esa próxima acción ya que cuando se mezclan los componentes de los explosivos es para utilizarlos inmediatamente ya que al cabo de poco tiempo pierden eficacia. Por eso, se mostró convencido de que los etarras estaban pensando cometer un atentado "muy pronto" y que la acción era "inminente".
El ministro también se refirió a la detención el sábado del presunto etarra identificado como Ibai Beobide Arza, en un control de la Guardia Civil entre las localidades guipuzcoanas de Asteasu y Villabona, cuando circulaba en una bicicleta en posesión de documentación falsa y una pistola. El arrestado llevaba "las peores intenciones", aseguró el titular de Interior, que dijo que es evidente que el presunto etarra "no estaba haciendo deporte porque nadie hace deporte con una pistola y un pendrive". "No tenemos más remedio que concluir que estaba preparando alguna fechoría, algo malo traía en la cabeza", insistió Rubalcaba, que consideró que así se reafirma que ETA lo está intentando "una y otra vez".
El ministro garantizó que Francia, Portugal y España están con "la guardia muy alta" y obteniendo éxitos "y así será una y otra vez hasta que acabemos con esta pesadilla".
Estas detenciones de miembros de ETA están haciendo mella en sus seguidores. Según el secretario general de Eusko Alkartasuna, Pello Urizar, "esta vez" la izquierda abertzale "no tiene en cuenta a ETA" a la hora de definir su estrategia, lo que constituye "la gran diferencia" del momento actual respecto a procesos anteriores que fracasaron.
Pierde fuerza. Urizar explicó a Efe que su partido aguarda expectante el resultado del debate interno de la izquierda abertzale para decidir si es posible abordar un trabajo común y configurar un espacio nacionalista "amplio". El dirigente de EA admite que para llegar a acuerdos con la izquierda abertzale estos deberán apostar por la vía de la democracia.
