Los ministros de Defensa de la Unión Europea (UE) encargaron ayer un plan para concluir de la mejor manera las misiones militares en Bosnia y Chad, mientras que siete países se mostraron dispuestos a unir sus medios a los de España y Francia para luchar contra la piratería en aguas de Somalia. Para esta última operación esperan contar con la ayuda de la OTAN y EEUU, que en la actualidad desarrolla en el cuerno de África la parte marítima de la operación antiterrorista Libertad Duradera.
El carácter informal del Consejo de Ministros en el que se han adoptado estas decisiones, celebrado en Deauville (Francia), impide que se transformen en órdenes inmediatas, que se posponen a la reunión formal que mantendrán los titulares de Defensa el próximo 10 de noviembre en Bruselas.
Éxito. España considera "un éxito" el resultado de este consejo, ya que la ministra de Defensa, Carme Chacón, defendió ante sus colegas tanto la transformación de la misión militar en Bosnia en una operación civil, como la necesidad de enviar una fuerza militar común al golfo de Adén, entre Somalia y Yemen.
Según el ministro de Defensa francés y de turno del Consejo, Hervé Morin, Alemania, Holanda, Bélgica, Suecia, Chipre, Lituania, y Gran Bretaña se sumaron ayer a España y Francia en su disposición a mandar medios marítimos y aéreos a esta conflictiva zona de África. Según el ministro alemán de Defensa, Franz-Josef Jung, la UE planea enviar tres aviones militares y tres fragatas, más un barco de apoyo logístico, para proteger a los barcos europeos.
En cuanto a Bosnia-Herzegovina, la UE cree que ha cumplido con éxito los objetivos de la misión militar que comenzó en diciembre de 2004 y es el momento de iniciar otra de paz en la zona.
